Aquellos que estén dentro del mundo de los videojuegos y los ordenadores gaming seguramente conozcan la gama Lenovo Legion. Es la línea de ordenadores y portátiles de Lenovo especializados en juegos y es la gama que le da nombre al primer smartphone gaming de la firma: el Lenovo Legion Phone Duel. En su interior encontramos lo último de lo último en cuanto a componentes, pero sin lugar a dudas lo que más llama la atención es su diseño y su pantalla. Bueno, y el RGB de la parte trasera y el doble puerto de carga, pero de eso hablaremos más adelante.
¿Por qué? Porque el Lenovo Legion Phone Duel está pensado para ser usado en horizontal. No solo porque tenga unos gatillos en el marco, sino porque la cámara para selfies está escondida en el marco derecho y la interfaz está perfectamente adaptada a este formato (con matices). Su pantalla, además, se refresca 144 veces por segundo, algo típico de los monitores gaming más populares. Pasa por nuestra mesa de análisis este peculiar dispositivo, así que veamos cómo se comporta en el día a día el Lenovo Legion Phone Duel.
Ficha técnica del Lenovo Legion Phone Duel
LENOVO LEGION PHONE DUEL | |
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DIMENSIONES Y PESO | 169,17 x 78,48 x 9,9 mm |
PANTALLA | AMOLED de 6,65 pulgadas |
PROCESADOR | Snapdragon 865+ |
MEMORIA RAM | 12/16 GB LPDDR5 |
ALMACENAMIENTO INTERNO | 256/512 GB UFS 3.0 |
CÁMARA TRASERA | 64 MP f/1.89 |
CÁMARA DELANTERA | 20 MP f/2.2, 81,7° |
BATERÍA | 5.000 mAh |
SISTEMA OPERATIVO | Android con Legion OS |
CONECTIVIDAD | 5G |
OTROS | RGB trasero |
PRECIO | Desde 899 euros |
Lenovo Legion Phone Duel- Móvil Gaming 6.65'' FullHD (2340 x 1080), Qualcomm Snapdragon 865+ 5G, 12GB RAM, 256 GB UFS 3.1, Tarjeta gráfica Qualcomm Adreno 650, Carga Rápida, Android 10, Negro
Diseño: RGB, por supuesto
Reconozco que comienzo este análisis pensando en lo muchísimo que hay comentar. El Lenovo Legion Phone Duel es un móvil muy peculiar, porque el toque gaming no lo tiene solo por fuera, sino que se aplica a todos y cada uno de los rincones del dispositivo. Así que como hacemos siempre vamos a ir de fuera hacia dentro, empezando pues por el apartado estético.
Como todo dispositivo gaming que se precie, el Lenovo Legion Phone Duel es de todo menos disimulado. Es un smartphone grande, pesado, grueso, llamativo y lleno de colores. Tiene un grosor de 9,9 milímetros, mide casi 170 milímetros de alto y pesa la friolera de 239 gramos, por lo que como se puede intuir no es que sea precisamente cómodo llevarlo en el bolsillo si usamos pantalones apretados.
Ahora bien, a pesar de ser pesado y sentirse como tal, porque en mano pesa, y bastante, es equilibrado. Se siente bien construido y es relativamente cómodo usarlo durante largas sesiones, sobre todo cuando jugamos a juegos en horizontal, ya que sujetamos el móvil con las dos manos y el peso se reparte mejor. En juegos en vertical, como 'Pokémon GO', la cosa cambia y puede llegar a ser incómodo, pero 'Pokémon GO' no es precisamente el título con el que saca pecho el Lenovo Legion Phone Duel.
Altura (milímetros) | Anchura (milímetros) | Grosor (milímetros) | Peso (gramos) | Pantalla (pulgadas) | Batería | Superficie (cm2) | Volumen (cc) | |
---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Lenovo Legion Phone Duel | 169,2 | 78,5 | 9,9 | 239 | 6,65 | 5.000 | 132,82 | 131,49 |
iPhone 12 Pro | 146,7 | 71,5 | 7,4 | 187 | 6,1 | 3.687 | 104,89 | 77,6 |
OnePlus Nord | 158,3 | 73,3 | 8,2 | 184 | 6,57 | 4.160 | 115,96 | 95,09 |
Huawei P40 Pro | 158,2 | 72,6 | 8,95 | 209 | 6,58 | 4.200 | 114,85 | 102,79 |
Samsung Galaxy S20 | 151,1 | 69,1 | 7,9 | 163 | 6,2 | 4.000 | 104,41 | 82,48 |
Pixel 4 XL | 160,4 | 75,1 | 8,2 | 193 | 6,3 | 3.700 | 120,46 | 98,78 |
LG V60 ThinQ | 169,4 | 77,7 | 8,9 | 219 | 6,8 | 5.000 | 131,62 | 117,15 |
Sony Xperia 1 II | 165,1 | 71,1 | 7,6 | 181,4 | 6,5 | 4.000 | 117,39 | 89,21 |
Xiaomi Mi 10T Pro | 165,1 | 76,4 | 9,33 | 218 | 6,67 | 5.000 | 126,13 | 117,69 |
El terminal tiene los bordes ligeramente curvados para mejorar el agarre, algo que se agradece en un dispositivo de semejantes dimensiones, aunque las esquinas son un poquito cuadradas para darle ese toque más agresivo. Es un móvil muy llamativo en todos los aspectos, sobre todo por la parte de atrás.
En la parte trasera tenemos varios elementos. Por un lado, a la derecha y a la izquierda tenemos los paneles de sujeción. A pesar de lo que pueda parecer en las imágenes, ambos paneles tienen una textura ligeramente rugosa que, sin ser la panacea, ayudan a que el teléfono no se resbale de las manos cuando lo hemos usado durante mucho rato. Al fin y al cabo está pensado para eso, para que juguemos largo y tendido. Es una textura muy agradable.
En la zona central tenemos el logo de Lenovo Legion que, por supuesto, es RGB. Por defecto es de color rojo, pero lo podemos configurar para que alterne los colores, se adapte al juego que tengamos en pantalla o esté apagado. También tiene diferentes efectos, como respiración, parpadeo, etc., y funciona de forma contextual. Por ejemplo, se ilumina del color que queramos cuando recibimos una llamada, un mensaje o cuando lo tenemos cargando. Tiene un buen nivel de brillo y luce realmente bien al jugar cuando la luz escasea.
Justo encima tenemos el flash LED de doble tono y a la izquierda las dos cámaras. Estamos más que acostumbrados a que las cámaras estén en la esquina superior izquierda del dispositivo, pero el Lenovo Legion Phone Duel está pensado para ser usado en horizontal. Tener las cámaras en la posición convencional podría suponer un problema de suciedad para los jugadores, así que Lenovo se las ha llevado a la zona central, casi fuera del alcance de nuestros dedos. Están integradas en el propio chasis, así que no sobresalen ni molestan.
En la parte superior / en el marco derecho tenemos un módulo. ¿De qué? De la cámara delantera, por supuesto. Lenovo no quiere que un notch o un agujero en la pantalla empeore la inmersión de su pantalla, así que la cámara delantera sale del lateral derecho. Justo en la parte trasera de dicho módulo, la que daría hacia fuera si miramos la pantalla del móvil, tenemos el micrófono que usará la cámara principal para grabar audio.
Este módulo está bien pensado, pero puede llegar a ser un lastre a la hora de usar el móvil en vertical. Es cierto que el Legion Phone Duel de Lenovo no aspira a convertirse en el mejor móvil fotográfico (y ya veremos que no lo es) y que prefiere ser usado en horizontal, pero para el día a día lo mejor es usarlo en vertical, y si queremos subir una historia a Instagram o mandar un selfie, la cosa se complica bastante, sobre todo si somos diestros, ya que taparemos el módulo con la mano y habrá que ingeniárselas para coger el móvil de otra forma.
Y por si todo lo que hemos comentado no fuera llamativo per se, tenemos que hablar de la decoración. En la parte trasera tenemos un acabado brillante con forma de X en color rojo que brilla cuando la luz impacta en él desde diferentes ángulos, haciendo un efecto "de dentro a fuera y viceversa" muy chulo. En nuestro caso es de color rojo, pero también está disponible en azul. Y si ya hablamos de la caja en la que viene el móvil, que suena a algo parecido a desenvainar una espada cada vez que la abres, apaga y vámonos. Es, como vemos, un dispositivo que llama la atención por los cuatro costados.
Pero sigamos, que la cosa no acaba aquí. En el lateral izquierdo tenemos los botones de volumen (a una distancia inalcanzable con una sola mano cuando sujetamos el móvil en vertical), un puerto USB tipo C, dos micrófonos y el logo de Lenovo. En la zona superior, de color rojo, tenemos otro micrófono. En el canto inferior tenemos el slot para la doble SIM, otro micrófono y otro USB tipo C (sí, son dos, luego veremos por qué) y en canto derecho tenemos el ya mencionado módulo de la cámara, el botón de inicio (encima del módulo, sí) y dos grabados rojos.
No son grabados decorativos, sino que son gatillos para jugar. Gatillos sensibles al tacto, no físicos como los del Black Shark 3 Pro. Tienen un sutil relieve que ayuda a identificarlos rápidamente cuando sujetamos el móvil en horizontal y son extremadamente configurables. No solo podemos decidir qué hacen en cada juego mapeando la posición del gatillo con un botón, sino que podemos modificar su sensibilidad al tacto para que respondan más o menos rápido.
Llevamos más de 1.600 palabras hasta esta línea y solo hemos repasando la parte trasera y los cantos, así que nos podemos hacer una idea de todo lo que está por venir. Como hemos visto no hemos mencionado ni el lector de huellas ni la ubicación de los altavoces, y tiene sentido. El lector de huellas está bajo la pantalla y los altavoces están en el frontal, justo encima y debajo de la pantalla. Esto, como veremos más adelante, es una implementación que a Lenovo le ha salido redonda.
Y ahora que ya conocemos el dispositivo por fuera, hablemos de la experiencia. Es un dispositivo que, como adelantábamos antes, es pesado y bastante grande. Usarlo durante largas sesiones cuando lo sujetamos en horizontal es sencillo, pero cuando lo sujetamos en vertical la cosa cambia, porque el peso recae en una sola mano y, dado su tamaño, es casi imposible llegar a todos los rincones de la pantalla usando el dedo pulgar como haríamos normalmente.
Llevarlo en el bolsillo es complicado. Yo, por ejemplo, suelo llevar pantalones pitillo con bolsillos pequeños, así que el móvil se siente realmente grande. No es un problema si usamos pantalones más anchos o llevamos el terminal en un bolso, pero a lo que quiero llegar es que a estamos ante un terminal que pesa 239 gramos, que tiene casi diez milímetros de grosor y que mide 169 milímetros de alto. Es grande y se siente como tal.
Sobre su diseño y acabado, queda en manos del usuario decidir qué le parece la estética agresiva, el RGB y la trasera llena de colores. A mí, personalmente, no me disgusta teniendo en cuenta para qué está pensado el móvil, pero entiendo que aquellos que busquen un terminal más disimulado, más para el día a día, más para llevarlo a cualquier lado, puedan tener cierta reticencia. Eso sí, maniáticos de las huellas, estáis avisados: se quedan muy marcadas en todos lados.
Pantalla: ver más
Vamos a pasar a la pantalla. Antes de nada, conviene destacar que el dispositivo tiene un protector de pantalla muy finito preinstalado cuyo fin es proteger el panel de posibles arañazos y golpes. Nosotros para el análisis lo hemos retirado para poder juzgar cómo rinde la pantalla a plena luz del día, su precisión y sus colores, pero podéis dejárselo puesto sin mayor problema.
Dicho esto, hablemos de la pantalla. El dispositivo monta un panel AMOLED de 6,65 pulgadas con resolución FullHD+ (2.340 x 1.080 píxeles) en formato 19,5:9, lo que se traduce en unos 388 píxeles por pulgada. No es la resolución más alta del mercado, pero tampoco hemos echado en falta más píxeles durante las sesiones de juego o en el día a día. El panel es compatible con HDR10+ y donde destaca realmente es en su tasa de refresco, que asciende a 144 Hz.
Pero antes de hablar de la tasa de refresco, conviene hacer hincapié en que la pantalla no llega hasta los bordes. Tanto en la parte inferior como en la parte superior tenemos dos pequeños marcos (no simétricos, ya que el de abajo es más grande), pero en esta ocasión está justificado, puesto que en ellos es donde encontramos los altavoces. Los marcos son negros, pero están bordeados por unos biseles rojos a juego con el resto del dispositivo.
El panel viene realmente bien calibrado de fábrica, tiene un nivel de brillo máximo más que aceptable incluso para usarlo a plena luz del día y un brillo mínimo suficiente para la noche. Los colores tiene una saturación correcta, pero tiene truco, ya que el Lenovo Legion Phone Duel tiene diferentes modos de color y el que viene preactivado por defecto es el dinámico, que adapta la saturación en función del contenido. Los otros dos modos se nos antojan demasiado apagados, así que recomendamos dejarlo como viene de fábrica. Algo a tener en cuenta es que no podemos calibrar el color manualmente como sí es posible en otros smartphones.
En cuanto a la tasa de refresco, el dispositivo viene preconfigurado de la siguiente forma: 90 Hz en general y 144 Hz solo en juegos. ¿Qué quiere decir eso? Que si no tocamos nada, el dispositivo tendrá los 90 Hz activados todo el rato y solo se pondrá al máximo cuando juguemos. Ahora bien, desde los ajustes podemos configurar la pantalla para que esté siempre a 144, 120, 90 o 60 Hz, así como desactivar los 144 Hz automáticos en juegos. Mi recomendación personal: dejadlo como viene de fábrica, es el punto más equilibrado.
Esta tasa de refresco se complementa con un tasa de muestre de 240 Hz. ¿Para qué? Para que la pantalla detecte los toques más rápido. Se activa yendo a los ajustes y seleccionando "toque rápido". ¿Se nota? No demasiado, pero sí se aprecia cierta mejora en la sensibilidad de la pantalla. No es algo que cambie radicalmente la experiencia de uso, pero sí se puede notar que está activado, aunque quizá sea algo más subjetivo.
¿En qué vamos a notar la tasa de refresco de 144 Hz? En la fluidez de los juegos. No hay color. Tenemos que entender que cuando tenemos 144 Hz estamos viendo más del doble de imágenes por segundo que en una pantalla convencional, por lo que todos los movimientos son más fluidos. Me gustaría extenderme más sobre la experiencia en juegos en el apartado del rendimiento, así que mejor esperamos hasta entonces.
Por lo demás, la pantalla tiene modo Always on Display, configurable con diferentes decoraciones, y es compatible con doble toque para despertar, pero no para apagar. El problema es que es demasiado grande, por lo que usarlo con una sola mano en horizontal es complicado y hacerlo en vertical lo es todavía más porque pesa mucho. Pero sea como fuere, la pantalla es sobresaliente en todos los aspectos (salvo en la resolución) y brilla en todas las situaciones.
Sonido: soberbio para jugar
Uno de los puntos fuertes del Lenovo Legion Phone Duel es el sonido, sin lugar a dudas. Decíamos antes que el dispositivo tiene los altavoces colocados en el frontal y que la jugada le había salido redonda a Lenovo, y el motivo es sencillo: no solo son dos altavoces estéreo que nos miran de frente y que se escuchan realmente bien, sino que no los tapamos con las manos cuando estamos jugando.
Normalmente los móviles tienen el altavoz en la zona inferior, justo al lado del puerto de carga. Cuando los sujetamos en horizontal para jugar lo más normal es que tapemos el altavoz, por lo que perdemos parte de la experiencia. Con los altavoces frontales esto no pasa, y si además se escuchan así de bien tenemos una experiencia redonda, soberbia, de las mejores que hemos tenido con un móvil.
El dispositivo tiene altavoces estéreo y una función llamada "efectos de sonido hiperaudio" que, básicamente, optimiza el rendimiento de los mismos a la hora de reproducir películas o jugar. Aunque el nombre sea un poco rimbombante, lo cierto es que se nota muchísimo y no entiendo que venga desactivado por defecto.
La experiencia con los altavoces es sobresaliente. El sonido es muy inmersivo. No voy a decir que sientas que te rodee como cuando llevas auriculares, pero desde luego ayuda muchísimo a meterte de lleno en el juego. También se aplica a la música, a las películas o a los vídeos de YouTube. El sonido es, sin duda, uno de los grandes puntos fuertes del Lenovo Legion Phone Duel.
Ahora bien, nada de jack de auriculares. Es curioso, de hecho, que este puerto no haga acto de presencia teniendo en cuenta que como se juega con auriculares no se juega de ninguna forma, pero Lenovo ha tenido a bien incluir un adaptador USB tipo C - jack en la caja. En cuanto al sonido Bluetooth no se queda corto, ya que cuenta con los códec LDAC, aptX HD, aptX y la tecnología Qualcomm TrueWireless Stereo Plus.
Rendimiento: overkill
Pero de nada sirve una estética gaming, una pantalla de 144 Hz y un sonido de escándalo si el motor no da la talla. Por fortuna, no es el caso. Lenovo no ha escatimado lo más mínimo con los componentes de su Legion Phone Duel. La firma china ha metido bajo el capó de este dispositivo nada que más 16 GB de memoria LPDDR5 (también hay versión con 12 GB), que es la tecnología más rápida que se despacha actualmente.
El procesador es el Snapdragon 865+, lo último de Qualcomm, que viene a ser un Snapdragon 865 con un diez por ciento más de potencia y una GPU Adreno 650 más rápida. El almacenamiento interno es de 512 GB UFS 3.0 (hay versión de 256 GB), que no es lo más rápido, pero tampoco se echa de menos más velocidad. El dispositivo está más que servido para ofrecer la experiencia en juegos que podemos esperar de un móvil gaming, pero también cumple con creces como móvil del día a día.
Sobra decir que no hemos tenido problemas de ningún tipo, ni lag, ni tirones, ni nada por el estilo. El rendimiento del móvil es sobresaliente y, por si fuera poco, podemos exprimir el procesador al máximo en juegos. Vamos a ahondar más en el sistema operativo en siguientes apartados, pero creo que conviene centrarnos en algunas partes relacionadas con el gaming en este. Antes de nada, os dejamos con los resultados de los benchmarks más abajo.
Lenovo Legion Phone Duel |
iPhone 12 Pro |
Xiaomi Mi 10T Pro | Samsung Galaxy Note 20 Ultra | Sony Xperia 1 II | Black Shark 3 Pro |
OnePlus 8 Pro |
Huawei P40 Pro |
Asus ROG Phone 3 |
Xiaomi MI 10 Pro |
|
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
PROCESADOR |
Snapdragon 865+ |
Apple A14 Bionic |
Snapdragon 865 |
Exynos 990 |
Snapdragon 865 |
Snapdragon 865 |
Snapdragon 865 |
Kirin 990 |
Snapdragon 856+ |
Snapdragon 865 |
RAM |
16 GB |
6 GB |
8 GB |
12 GB |
8 GB |
8 GB |
12 GB |
8 GB |
8 GB |
8 GB |
GEEKBENCH 5 (SINGLE/MULTI) |
971 / 3.367 |
1.614 / 4.148 |
905 / 3.341 |
872 / 2.463 |
905 / 3.330 |
906 / 3.316 |
885 / 3.136 |
943 / 2.527 |
900 / 3.296 |
892 / 3.224 |
3D MARK (SLING SHOT) |
9.817 |
5.457 |
- |
6.311 |
8.885 |
7.330 |
8.726 |
4.074 |
8.747 |
- |
PCMARK WORK |
13.462 |
- |
10.694 |
10.012 |
9.994 |
9.878 |
13.414 |
9.476 |
12.656 |
9.929 |
Como podemos ver, el Lenovo Legion Phone Duel saca pecho en todos y cada uno de los apartados, pero más allá de los resultados de las pruebas sintéticas, considero más interesante hablar de la experiencia. De un teléfono que monta semejantes componentes no podemos esperar otra cosa que no sean elogios, está claro, pero en el caso del Lenovo Legion Phone Duel hay muchas más cosas a valorar más allá de la fuera bruta.
Lo primero es la refrigeración. Como los ordenadores gaming, y salvando las evidentes distancias, el móvil tiene un sistema de refrigeración líquida doble que, sorprendentemente, consigue mantener la temperatura muy a raya. Incluso en sesiones de gaming más largas de la cuenta, con juegos pesados como 'Call of Duty: Mobile', 'PUBG Mobile' o 'Asphalt 9', mientras el móvil estaba cargando, el dispositivo nunca ha pasado de los 43ºC de temperatura. Es más, aunque se caliente, el usuario apenas lo nota, ya que el procesador está en la parte central del móvil, donde nuestros dedos no llegan al usar el móvil en horizontal. Todo parece muy bien pensado para favorecer el juego.
Lo segundo es la vibración. Es una locura, simple y llanamente, cuando funciona, claro. El Lenovo Legion Phone Duel tiene un sistema de vibración muy potente que se aprovecha muy bien en ciertos juegos. Básicamente, el motor háptico se mueve al ritmo de la música o de los disparos, mejorando así la inmersión. Está muy logrado y la sensación es fabulosa. El problema es que solo hay tres juegos que admiten este sistema de "vibración para juegos 4D": 'Real Racing 3', 'PUBG Mobile' y 'Asphalt 9'. La lista se queda corta.
Lo tercero son los gatillos. Aunque me gusta más la idea del Black Shark 3 Pro, los gatillos del Lenovo Legion me han parecido muy interesantes. Como decíamos anteriormente, el dispositivo nos permite configurar los gatillos en función del juego para que, por ejemplo, en 'Call of Duty: Mobile' mapeemos el izquierdo en el botón de apuntar y el derecho en el botón de disparar. Además, podemos ajustar la sensibilidad para que reaccione más o menos rápido y, por si fuera poco, la pulsación se acompaña de vibración. Funcionan muy bien y seguro que gustarán a los amantes de los tiros.
Además, al ser una implementación del propio software del móvil, es independiente del juego. No hace falta que el juego esté adaptado. Se aprovecha más en los shooters por motivos obvios, pero se puede mapear en cualquier juego. Pensemos, por ejemplo, en el botón de matar en 'Among Us' o en el botón del nitro en cualquier juego de coches. Simplemente hay que abrir el asistente, mapear el gatillo y listo. Es muy fácil y, lo mejor de todo, es que funcionan muy bien. Mi única preocupación es que algún juego pueda detectar esto como un hack y nos banee, pero francamente, lo dudo.
Finalmente, el cuarto elemento es el "Reino de Legion". Para que nos entendamos, es como una suite de herramientas para jugadores llena de opciones, además de un lanzador de juegos. Se activa pulsando los dos gatillos a la vez desde cualquier pantalla o app y sirve para iniciar un juego rápidamente. El sistema detecta todos los que tenemos instalados y los muestra automáticamente.
Cuando abrimos un juego, el "Reino de Legion" sustituye a la barra de notificaciones y nos muestra un panel con la temperatura del teléfono, el rendimiento del procesador y de la GPU, el ping de la red (WiFi o móvil), dos ajustes para el brillo y el volumen, la temperatura del móvil, la tasa de refresco y diferentes opciones adicionales. El ping es mejor cogerlo con pinzas, ya que el teléfono da un dato y los juegos otro. Por ejemplo, en 'PUBG Mobile' teníamos un ping de 80 ms, pero el asistente decía que era de 210 ms.
Entre ellas hay un par que me gustaría destacar. La primera es la retrograbación, muy interesante. Es como una grabadora de pantalla retroactiva. Si la pulsamos guardará un clip de vídeo de los 15 últimos segundos (o el tiempo que elijamos) que hayamos jugado en la galería, muy guay para grabar momentos de la partida sin tener que estar grabando la pantalla todo el rato.
Otra es el modo streaming. Como os podéis imaginar, este modo activa la cámara delantera y pone nuestra cara en la pantalla, de forma que podemos emitir la partida en directo mostrando nuestras reacciones en vivo. Incluso podemos quitarnos el fondo y dejar solo la cara si queremos. También podemos desactivar las notificaciones de apps y llamadas, para que nadie nos moleste, y hasta abrir WhatsApp o Line (son las dos únicas apps compatibles) en una ventana pop-up durante la partida.
Y por si todo esto fuera poco, por si nos faltase potencia bruta, el dispositivo nos permite activar un modo "violencia" que fuerza el procesador para que tanto CPU como GPU funcionen a la máxima velocidad posible. ¿Se nota? No demasiado, aunque consigue mantener los fotogramas algo más estables en juegos pesados. Sea como fuere, Android sabe bien qué recursos necesita cada aplicación y sabe gestionarlos correctamente. No hace falta que forcemos el SoC para que funcione a su máxima potencia, y menos si tenemos un procesador Snapdragon 865+. En términos gamer, es un poco overkill.
La experiencia en conjunto es superlativa. Tenemos una pantalla con una buena tasa de refresco, un procesador con la potencia suficiente para mover lo que necesitemos, unos gatillos que mejoran el gameplay, un sonido redondo, una vibración excelente y un montón de opciones de gestión accesibles desde los propios juegos. Sobre el papel es fabuloso, pero no podemos olvidarnos de una cosa: estamos hablando de un móvil.
Es cierto que en países como China el juego móvil es una eminencia. Juegos como 'Honour of Kings' ('Arena of Valor' en Europa), 'Mobile Legends: Bang Bang' y compañía son verdaderos exponentes de los Esports, pero a diferencia de los juegos de ordenadores, donde los 144 Hz sí pueden darte ventaja, donde más FPS siempre son mejor (en el mundo competitivo) y donde tener más velocidad de respuesta puede marcar la diferencia entre ganar o perder, los juegos móviles no aprovechan estas virtudes. Es más, no todos los juegos Android soportan los 144 Hz.
No deja de ser verdad que la experiencia de juego es deliciosa con estas especificaciones. Yo me considero un jugón empedernido y he disfrutado muchísimo jugando con el Lenovo Legion Phone Duel, pero mi sensación es que son demasiadas cosas para jugar en el móvil. Es mucho mejor jugar en este móvil que en uno con 60 Hz y procesador de gama media, sin duda alguna, pero no noto el mismo salto que puede haber al pasar de un ordenador de gama baja a un PC gaming en toda regla porque los juegos no lo permiten, porque son formatos distintos y porque el juego móvil suele ser más casual.
No considero que tener dos gatillos me haya dado ventaja en 'PUBG Mobile', ni considero que tener 144 Hz de tasa de refresco me ayude a matar más rápido o tener precisión en un juego al que juego conectado al WiFi, con una latencia relativamente alta (si lo comparamos con la que se puede tener en un PC). Quizá en un futuro la cosa cambie, quién sabe.
Pero sea como fuere, lo que no deja de ser cierto es que más allá del mundo gaming, el Lenovo Legion cumple con todos los requisitos de un móvil de gama alta premium. Su rendimiento es sobresaliente y compite de tú a tú contra los mejores smartphones del momento. Es ideal para jugar a 'Call of Duty: Mobile' o 'Brawl Stars', pero también es ideal para todo lo demás. Siempre y cuando no nos importe el diseño, claro.
Finalmente, no me gustaría terminar este apartado sin mencionar que el dispositivo es compatible con redes 5G NSA y SA, por lo que se podrá usar para acceder a este red en aquellas ciudades en las que esté disponible. Córdoba, donde habita un servidor, no es una de ellas, así que no puedo entrar a valorarlo. En cualquier caso, ya hemos tenido ocasión de hablar en profundidad de la experiencia con un móvil 5G y la diferencia con respecto a un móvil 4G son pocas.
Biometría: una asignatura pendiente
En este apartado vamos a tener que darle un tirón de orejas a Lenovo. Por un lado, no tenemos desbloqueo facial, algo que podemos entender más o menos si tenemos en cuenta que el módulo de la cámara está en el lateral derecho y no es lo más cómodo. Por otro lado, tenemos lector de huellas bajo la pantalla, pero su rendimiento es algo pobre.
El lector de huellas está en una posición cómoda, sobre todo para usuarios diestros, pero falla demasiado. No me atrevería a dar una cifra, pero por norma general no ha sido fácil que el sensor me detecte la huella correctamente a la primera. Además, al ser un sensor óptico, se ilumina cuando ponemos la yema del dedo sobre él, algo que de noche no es demasiado agradable.
Yo solucioné el problema grabando dos veces la misma huella, pero quiero creer que es algo que irán arreglando mediante actualizaciones de software poco a poco. Si el resto de elementos del dispositivo nos han sorprendido gratamente, el lector de huellas nos ha dejado con un sabor de boca un tanto agridulce.
Software: pensado para ser horizontal
Lenovo presume de que su Legion Phone Duel es el primer smartphone en tener una capa de personalización adaptada para ser usada en horizontal. El uso del móvil en horizontal gana enteros cuando lo hacemos en juegos, por ejemplo, pero cuando usamos aplicaciones del día a día como Instagram, Twitter o WhatsApp es harina de otro costal. Las aplicaciones tipo timeline están pensadas para ser usadas en vertical y en horizontal la experiencia es bastante peor.
Por ejemplo, si usamos WhatsApp en horizontal no solo veremos menos cantidad de chat, sino que al lanzar el teclado este ocupará toda la pantalla, por lo que no podremos ver los mensajes que vayan llegando a la ves que escribimos. Lo mismo en Twitter, Telegram y compañía. No obstante, aquellas apps que solo funcionen en vertical, como Instagram o TikTok, se pondrá en dicho formato nada más lanzarlas, ya que no tienen modo horizontal, lo que nos obligará a estar cambiando la forma en que sujetamos el móvil todo el rato.
Precisamente por ello procede hacer un apunte: aunque el teléfono esté pensado para ser usado en horizontal y tanto los ajustes como el launcher estén adaptados a este formato, se puede usar en vertical sin ningún problema. Podemos configurar el dispositivo para que esté siempre en vertical u horizontal o para que rote, por no hablar de que Android tiene un botón que nos permite girar la pantalla manualmente cuando detecta que estamos usando el teléfono en una posición u otra. Es mucho más cómodo usarlo en vertical, pero a gusto del consumidor.
Hablemos del sistema operativo. El Lenovo Legion Phone Duel llega con Android 10 preinstalado de fábrica, pero maquillado con ZUI 12 y Legion OS. Estas capas aplican una modificación muy agresiva a Android, tal y como podemos ver en las capturas. Los iconos tienen cierto relieve, el fondo de pantalla es animado por defecto y hay algunos widgets, como el de la hora, que muestran también el estado de la GPU y la CPU.
El cajón de aplicaciones también se ha modificado. Las apps están ordenadas alfabéticamente y en la parte superior se muestran las aplicaciones que más usamos en el día a día. Como se puede intuir, va cambiando conforme usamos el teléfono. La barra de notificaciones, por su parte, poco o nada tiene que ver con la de Android stock. Pero más allá de esos cambios, el sistema operativo es relativamente limpio y si no nos gustan los iconos podemos aplicar el tema con la apariencia de Android stock desde los ajustes y deshacernos de ellos.
Pero más allá de esto, es en la app de ajustes donde veremos que la interfaz se ha adaptado al modo horizontal. El Lenovo Legion Phone Duel se comporta como si fuera una tablet, de forma que deja el menú principal a la izquierda y las opciones dentro de cada apartado a la derecha, algo que permite navegar por los ajustes rápidamente. Esto sí es cómodo, pero no tanto como para justificar el estar usando el móvil todo el rato en horizontal.
Los ajustes son bastante limpios y llama la atención teniendo en cuenta que la pantalla principal está muy cargada. Tenemos varias opciones, como U-Touch (que no deja de ser un sistema de navegación gestual), el modo periféricos (para usar un teclado y ratón o un mando con las apps), bienestar digital, la configuración de "Reino de Legion" y hasta una wiki que nos permite consultar toda la información de la suite de gaming que veíamos en el apartado anterior. Es un software bastante completo y muy pensado para que sea fácil de usar, así como muy orientado a optimizar la experiencia en juegos.
Aunque funciona bien y no hemos tenido nunca ningún tipo de lag, no está exento de bugs puntuales. Alguna vez nos ha pasado que la pantalla no respondía al estar una llamada o que no se detectaban bien los gestos, pero imagino que será cuestión de que Lenovo lance actualizaciones y vaya puliendo la experiencia. Y falta hace, porque el parche de seguridad que está instalado por defecto es el de agosto de 2020 y estamos a finales de noviembre.
Batería: doble puerto de carga para aprovechar los 90W
Mucho gaming y todo lo que queramos, pero de nada sirve tener un terminal armado hasta los dientes si la batería no aguanta. Lenovo ha implementado en el interior de su Legion Phone Duel una batería de 5.000 mAh, aunque si queremos ser exactos lo que tenemos realmente es una doble batería de 2.500 mAh cada una que, en conjunto, da 5.000 mAh.
La batería, efectivamente, está dividida en dos y cada una de las baterías está debajo de los paneles de sujeción que mencionábamos en el apartado del diseño. Haciendo esto Lenovo consigue dos cosas: una, que la batería no se caliente en exceso cuando le exigimos al procesador más de la cuenta, ya que no está encima, sino al lado. Dos, que la batería se cargue muy rápido.
El Lenovo Legion Phone Duel tiene un sistema de carga rápida de 90W que carga ambas baterías simultáneamente. Ahora bien, para aprovecharla tendremos que usar el enorme cargador que viene en la caja y conectar los dos cables USB tipo C, también incluidos, a la vez, uno a un lado y otro debajo. El dispositivo tarda media hora en cargarse y 10 minutos en ponerse al 40%. Es de las cargas rápidas más rápidas, valga la redundancia, que hemos visto hasta el momento.
Tanto es así que yo, que soy de ese tipo de usuarios que dejan el teléfono cargando por la noche, no lo he he hecho durante el tiempo que he estado probando el móvil. Si me quedaba sin batería lo enchufaba media hora y listo, teléfono cargado por completo. Si preferimos una carga más lenta, basta con enchufar solo un cable.
En cuanto a la autonomía, por norma general el Lenovo Legion Phone Duel nos ha dado algo más de siete horas de pantalla activa haciendo un uso normal, teniendo los 90 Hz activados y los 144 Hz en juegos. No es la cifra más alta del mercado, pero teniendo este sistema de carga rápida tampoco es que hayamos echado en falta más horas de pantalla activa. Por si a alguien le interesa, una partida de 'PUBG Mobile' de media hora que acabó en victoria consumió un 10% de la batería con gráficos y tasa de refresco al máximo.
Cámara: bienvenidos a mi canal de Twitch
Llegamos así a uno de los puntos más peculiares del Lenovo Legion Phone Duel: la cámara. A diferencia de muchos otros smartphones, que abogan por dejar las lentes en una de las esquinas y sobre un módulo, Lenovo ha preferido integrarlas en el propio chasis del terminal y colocarlas justo en la zona central. La posición está justificada, ya que así evitamos tocarlas más de la cuenta cuando usamos el móvil en horizontal, pero al usarlo en vertical la cosa cambia.
Al sujetar el móvil en horizontal, sobre todo con la mano derecha, tocar las cámaras es imposible. Con la mano izquierda es más probable, ya que las lentes están ligeramente desplazadas hacia la izquierda para hacerle hueco al LED RGB central. Como digo, para hacer fotos en horizontal no hay problema de ningún tipo, pero si sujetamos el teléfono en vertical para hacer una foto en vertical sí.
¿Por qué? Porque la mano va a tapar casi por completo la cámara. Es decir, se nos va a llenar de huellas / suciedad y, además, es bastante probable que salga un trocito del dedo si usamos el gran angular, algo que ya me pasó con las cámaras del Xiaomi Mi Note 10 Pro. Al final es una cuestión de saber sujetar el móvil y de acostumbrarse.
A lo que no me acostumbro es a tener la cámara selfie en el lateral. Estamos de acuerdo en que el teléfono está pensado para ser usado en horizontal, pero la mayor parte del tiempo lo vamos a usar en vertical, así que si queremos grabar una historia para Instagram o mandar un selfie por WhatsApp vamos a tener que o bien darle la vuelta al móvil, o bien sujetarlo de una forma muy poco natural para dejar que la cámara pop-up se abra. Esto es tedioso y a larga un poco desesperante.
En cualquier caso, no es un móvil que esté pensado para hacernos selfies. La idea de tener el módulo ahí es poder hacer streaming de videojuegos con nuestra cara sobre el gameplay. Dependerá de cada usuario encontrarlo más o menos útil, pero seguramente no podamos comparar la cantidad de veces que nos hacemos un selfie con la cantidad de veces que hacemos streaming de una partida de 'Call of Duty: Mobile'. Cuestión de prioridades, pero para el usuario medio es una implementación un poco deficiente.
Hablemos de sensores. El Lenovo Legion Phone Duel no va a conquistar a los usuarios más aficionados a la fotografía con su versatilidad y opciones. Tenemos un sensor principal de 64 megapíxeles con apertura f/1.9 que ya sabemos que toma foto efectivas de 16 megapíxeles gracias a Pixel Binning, así como un gran angular (que hará a la vez de macro) de 16 megapíxeles con apertura f/2.2. Es capaz de grabar en 4K a 30 FPS y no tiene OIS, sino EIS. El sensor delantero es de 20 megapíxeles con apertura f/2.2 y graba en FullHD.
App de cámara
La app de cámara funciona bien y es bastante limpia. La interfaz no está sobrecargada con muchísimas funciones y las que tiene, como el modo manual, la panorámica o el modo de 64 megapíxeles están escondidas en el botón Legion que hay sobre el obturador. Tiene integración con Google Lens y un botón que nos permite alternar entre los diferentes niveles de zoom.
Es curioso que el botón siga la secuencia zoom x1 > zoom x2 > zoom x0,6, cuando el zoom x2 realmente es un cropping. Quizá sería más interesante que pasáremos del zoom x1 al zoom x0,6 por eso de que no tenemos telefoto, pero en cualquier caso siempre podemos hacer pinch-to-zoom con dos dedos para desplazarnos entre angulares.
Los ajustes son pocos y suficientes para la mayoría de casos de uso. En cuanto a modos, tenemos los clásicos (retrato, panorámica, modo noche...), pero también una función curiosa para el vídeo que es el modo dual. Este activa los dos sensores traseros para grabar un vídeo con dos ángulos a la vez, e incluso nos permite hacer diferentes niveles de zoom con el sensor principal. Si usamos la cámara en horizontal, podremos usarla para grabar vídeo con la cámara delantera y trasera a la vez.
Fotografía de día
Cuando la luz acompaña el Lenovo Legion Phone Duel no termina de brillar y se nota que no es un móvil con la fotografía como reclamo. La foto sale bien de detalle, pero el HDR es demasiado agresivo y provoca que el resultado sea poco natural en las zonas más iluminadas. Además, cuando hay demasiada luz es relativamente frecuente que aplique cierto efecto glow que empeora el nivel de detalle. Parece, sin duda, un problema de procesado.
Cuando sacamos el gran angular vemos que la imagen tiene ese efecto wow que tanto gusta, pero la calidad general es bastante baja. Si no ampliamos la foto está bien, pero a la mínima que lo hacemos podemos observar que los bordes no están bien conservados, que el efecto glow que mencionábamos antes es más evidente y que los elementos más lejanos quedan marcados por un claro efecto acuarela.
Por otro lado, si hacemos zoom veremos que el sensor de 64 megapíxeles ayuda a conservar ligeramente el detalle, pero se nota que no es un telefoto. Al fin y al cabo estamos haciendo cropping y estaremos sacrificando nitidez al acercarnos. Algo que llama la atención es que la foto con zoom x2 tiene más nivel de detalle que la conseguida con el sensor principal, minipunto positivo, aunque colores más apagados, minipunto negativo.
Como sucede en todos los móviles con sensores de 48, 64 y 108 megapíxeles, la cámara combina cuatro píxeles en uno para conseguir más luz y reducir el peso de la imagen, pero podemos forzar el sensor para conseguir la foto en tamaño completo. En el caso del Lenovo Legion Phone Duel conseguimos una imagen bastante mejor que la obtenida con el sensor principal, aunque con un HDR menos logrado. Eso nos lleva a pensar que que el efecto brillo y la falta de detalle no es culpa del sensor, sino del postprocesado.
Selfie de día
Los selfies, sin embargo, nos han gustado mucho. La cámara delantera, dejando de lado que no es cómoda para sacarnos fotos en vertical, sabe conseguir un buen selfie. Las zonas oscuras quizá se quedan demasiado apagadas, pero la foto es buena, el sujeto tiene buen nivel de detalle y el HDR consigue recuperar los cielos y las luces altas. Es un muy buen selfie, simple y llanamente.
Si activamos el modo retrato veremos que el dispositivo también se sabe comportar. El desenfoque es relativamente preciso, aunque falla en algunas zonas cuando la diferencia de color entre el sujeto y el fondo no es tan clara, pero sabe rendir en zonas como el pelo. El sujeto sale bien definido y la nitidez es correcta, así que se podría decir que sin ser el mejor modo retrato del mercado, es notable.
Fotografía noche
De noche nos encontramos unos resultados similares a los conseguidos de día. Sin embargo, podemos apreciar que el efecto glow del que hablábamos antes no es tan notable, lo que refuerza la idea de que es un problema del procesado del HDR en las zonas de luces altas. Cuando la luz deja de abundar el Legion Phone Duel consigue resolver la escena, aunque podemos ver que las luces más estridentes no están bien gestionadas, que la foto tiende demasiado al amarillo y que basta con ampliar para detectar el efecto acuarela. No es una mala foto, todo sea dicho, pero tampoco es la mejor de su rango de precios.
Con el gran angular conseguimos una imagen bastante peor. Es cierto que la escena está relativamente bien resuelta, pero las luces altas siguen teniendo demasiado protagonismo y el nivel de detalle brilla por su ausencia. Si antes teníamos efecto acuarela al ampliar, ahora es todavía más evidente. No es un problema exclusivo de este móvil, ni mucho menos. Por norma general, los grandes angulares tienden a hincar la rodilla de noche y el del Lenovo Legion Phone Duel no es una excepción.
Si hacemos zoom de dos aumentos (digital, recordemos) veremos los efectos del cropping. A simple vista la imagen no sale del todo mal, pero si ampliamos un trozo y sacamos la lupa veremos que los objetos están empastados y que la nitidez no es demasiado alta. Servirá para sacar alguna foto puntual para compartir en redes sociales, pero se sigue echando en falta la presencia de un telefoto dedicado.
Como todo smartphone que se precie, el Lenovo Legion Phone Duel tiene un modo noche para rescatar luz y detalle en situaciones de baja luminosidad. Lo que hace realmente es tomar una larga exposición, por lo que tenemos que sujetar el móvil durante unos segundos mientras toma la foto. El resultado, como podemos comprobar, es una imagen con mucha más luz, algo más de detalle y un balance de blancos que tiende demasiado al rojo. La foto queda un poco artificial, pero al final es una cuestión de gustos personales.
Podemos comprobar que esta tendencia al rojo no es exclusiva de la imagen de muestra, sino que se repite en otras tantas escenas. Todas ellas tienen en común una mejor iluminación, un nivel de detalle más alto y un resultado algo artificial. En cualquier caso, es un modo que permite salvar la escena. Lo curioso es que no se activa solo cuando el móvil detecta que hay poca luz, sino que somos nosotros los que tenemos que activarlo manualmente. Tampoco funciona en el gran angular.
Selfie de noche
Si de día el selfie nos ha gustado mucho, de noche no tanto. El rendimiento del sensor cae bastante y donde antes había un buen nivel de detalle ahora tenemos un efecto acuarela demasiado evidente y fondos más difusos. No es el peor selfie nocturno que hemos visto, cierto es, pero tampoco queda a la altura de otros terminales de 900 euros. Servirá para echarnos una foto puntual de vez en cuando, pero no tiene nada que ver con el conseguido de día.
Exactamente lo mismo se puede decir del modo retrato. El nivel de detalle del sujeto y la calidad global de la foto es exactamente la misma que en el selfie anterior, aunque hay que romper una lanza a favor del dispositivo: el recorte es igual de preciso que de día, incluso en zonas complicadas. Si miramos con atención podemos notar alguna que otra imperfección, sí, pero en líneas generales el recorte está bien. Una lástima que la nitidez del sujeto se reduzca tanto.
Vídeo
El vídeo tampoco es el punto fuerte del Lenovo Legion Phone Duel. Es cierto que graba en 4K, pero la tasa de fotogramas por segundo está limitada a 30 cuadros. No tiene estabilización óptica y se nota que estamos usando EIS, sobre todo en los pequeños saltos que hay cuando damos pasos o movemos la cámara para grabar otros ángulos. El nivel de detalle es alto, cierto, pero no es la mejor cámara de vídeo que hemos probado en un smartphone.
También podemos grabar con el gran angular (aunque no alternar en tiempo real entre una lente y otra) y, curiosamente, la estabilización es bastante mejor, probablemente por el efecto propio de grabar desde más atrás. Aunque estamos grabando en 4K la calidad es bastante más baja, pero el resultado final no es tan malo como se podría esperar.
Con la cámara delantera conseguimos un vídeo en una resolución máxima de FullHD y el resultado es bastante bueno. El único problema es que la cámara se acerca demasiado a nosotros para poder estabilizar, por lo que salimos demasiado cerca y la cámara no es capaz de grabar lo que hay a nuestro alrededor. En cualquier caso, nos ha gustado más el resultado con la cámara delantera que con la trasera.
Y decíamos anteriormente que teníamos un modo dual, y bueno, los resultados son los que son. La diferencia de calidad entre el sensor principal y el sensor delantero es demasiado alta y se nota que el vídeo no es del todo fluido. Es una función que no está mal tenerla, pero no rinde como nos habría gustado.
Grabando de noche conseguimos unos resultados bastante peores. Tanto con el sensor principal como con el gran angular obtenemos unos clips llenos de ruido, con saltos de frames fruto de la estabilización electrónica y la falta de luz. ¿Sirve la cámara para grabar un vídeo puntual de noche? Sí, pero no esperemos obtener un vídeo bien estabilizado y libre de ruido. La cámara, como podemos ver, no es el principal reclamo del Lenovo Legion Phone Duel.
Lenovo Legion Phone Duel, la opinión de Xataka
El Lenovo Legion es un dispositivo de lo más peculiar y que, como todos los móviles gamers, no están pensados para el público general, sino para un nicho muy concreto de usuarios. El terminal llama la atención desde el primer momento, empezando por la caja que suena y el diseño de la trasera llena de luces y color. El diseño es algo muy personal y depende de cada usuario, pero yo soy de los que piensan que un móvil gamer no solo debe mover los juegos sin problema, sino parecer un móvil gamer, y este lo consigue.
La pantalla es una delicia, simple y llanamente. Los 144 Hz son un gustazo, la tecnología AMOLED hace que se vea perfectamente y ya sea para jugar o para ver películas, el panel cumple a la perfección. No es la mejor pantalla del mercado, pero sí es propia de un dispositivo de gama alta. Acompaña el sonido, de los mejores que hemos probado, y el sistema de vibración, cuyo único punto negativo es que la lista de juegos compatibles es muy escasa.
Del rendimiento poco se puede decir que no se haya dicho ya. El terminal es un gama alta en mayúsculas y ofrece lo esperable, para bien. No hemos tenido problemas a la hora de jugar ni de usar apps del día a día. En lo que concierne a los juegos, la suite de herramientas de Lenovo es bastante útil y aporta bastante a la hora de jugar, por no hablar de los gatillos, que son sensacionales en los shooters.
Le acompaña una batería más que suficiente para echar el día, pero queda relegada a un segundo plano por culpa del sistema de carga. Puede ser más o menos aparatoso tener un cargador tan grande y usar dos cables USB tipo C, pero eso no quita que el dispositivo tenga una de las cargas rápidas más potentes hasta la fecha. Es un apartado que nos ha gustado mucho.
El que no nos ha convencido tanto es el de la fotografía. Los móviles gaming, por lo general, suelen pecar de tener una cámara menos solvente que sus competidores en precio y el Lenovo Legion Phone Duel no es una excepción. Tiene mucho margen de mejora y esperamos que Lenovo solucione los problemas de rendimiento del sensor principal mediante actualizaciones, porque la cámara no está a la altura de su precio.
Y hablando del precio, queda en manos de cada usuario decidir si merece o no la pena pagar desde 900 euros por un móvil para jugar. Por ese mismo precio podemos conseguir smartphones con prestaciones técnicas similares, más solventes en el apartado fotográfico y con un diseño más convencional. Como móvil gaming es uno de los claros candidatos si lo miramos con conjunto, pero como móvil del día a día quizá no lo sea tanto.
8,7
A favor
- La carga rápida de 90W hace que te olvides de cargarlo por las noches.
- El rendimiento es, sencillamente, fabuloso en cualquier tipo de juegos.
- La pantalla de 144 Hz es una delicia.
En contra
- La cámara tiene mucho margen de mejora.
- El móvil pesa y es grande, por lo que no es apto para todos los usuarios (y bolsillos).
- La cámara retráctil lateral no convence.
El terminal ha sido cedido para la prueba por parte de Lenovo. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.