Xiaomi usó los 10 GB de RAM y las cámaras frontales desplegables como principal argumento de su nuevo gama alta, el Xiaomi Mi MIX 3, que todavía no tiene fechas ni precios oficiales fuera de China.
No obstante, ya hemos podido tener una primera toma de contacto con el sucesor del Xiaomi Mi MIX 2s, que además de los puntos en los que hizo hincapié la empresa, incluye más novedades interesantes.
Xiaomi Mi MIX 3, primeras impresiones en vídeo
Un diseño que engancha
Como es habitual en la familia MIX, el material por el que se apuesta en el panel trasero es la cerámica. Se nota en los acabados y en la sensación en mano, más suave que el cristal, no tan deslizante, pero probablemente igual de imán de huellas.
La disposición de los botones me ha parecido bastante cómoda. A un lado encontramos el botón de subir y bajar volumen y debajo el de encendido y apagado, y al otro el botón dedicado al asistente Xiao AI (por ahora sólo disponible en mandarín, como comentaré en el apartado correspondiente) y la ranura para la SIM. No incluye ranura para microSD, por lo que tendrás que conformarte con los 128 o 256 GB de almacenamiento interno que se ofrecerán en las diferentes versiones.
En la parte posterior se encuentra la doble cámara en la esquina superior izquierda y el sensor de huella dactilar centrado en la parte de arriba. Me ha parecido una posición bastante natural y, una vez configurada, la detección de huella es muy, muy rápida. Me ha sorprendido.
Finalmente, en la parte de abajo tenemos el conector USB Tipo C y los altavoces. Como su predecesor, no tiene puerto minijack, por lo que necesitarás adaptador para escuchar música con auriculares convencionales.
¿Se notan esos 218 gramos de peso? Sí. Probablemente sea el gama alta más pesado de este año (por encima de los 201 gramos del Note 9 o de los 208 del iPhone XS Max), aunque en mano no me ha parecido nada aparatoso, algo a lo que quizá colaboren los materiales y, seguramente, una distribución interna equilibrada de los componentes.
Finalmente, la decisión de no optar por notch pero lograr un 93,4% de ratio de pantalla es un acierto estético (a pesar de que los bordes superior e inferior son asimétricos) y es posible gracias a la inclusión de dos cámaras frontales deslizables, un sistema que, como vemos a continuación, es bastante familiar a los que vivimos los años de los teclados desplegables en móviles.
¿Y las cámaras desplegables, qué?
El efecto sorpresa se lo llevó el OPPO Find X, pero Xiaomi también ha elegido el camino de la cámara desplegable para evadir el polémico notch.
Lo que diferencia a ambos sistemas es que el de OPPO es automático (por lo que tienes que esperar a que se despliegue), mientras que el de Xiaomi es más a la vieja usanza, es decir, como los míticos teclados deslizables de la vieja Nokia (por ejemplo, Nokia N95). En realidad es un sistema semiautomático por los imanes que tiene, pero si el usuario no impulsa hacia arriba, las cámaras frontales no saldrán. En otras palabras, no hay motores que muevan el sistema.
No cuesta nada acostumbrarse a ello y, aunque es cierto que pierde en ergonomía cuando las cámaras están desplegadas, creo que es una solución inteligente al asunto del notch, sencilla e intuitiva de usar. Como plus, ese clic que hace al salir probablemente traiga buenos recuerdos a los nostálgicos de tiempos pasados. Por cierto, sobre si acabará rompiéndose el mecanismo con el uso, Xiaomi nos confirma que soportará hasta 300.000 ciclos, que dan para unos cuantos selfies.
Este sistema deslizable también sirve para otras cosas. Por ejemplo, puedes configurarlo para responder llamadas cuando lo despliegues o para abrir una aplicación que tú elijas. Como curiosidad, también puedes configurar un sonido para cuando lo abras. Una pena no haber tenido un balido de oveja a mano para la ocasión.
Potencia bruta
Xiaomi ha anunciado tres variantes de RAM para el Mi MIX 3: 6, 8 y 10 GB. Sí, has leído bien esto último. Casualmente el Mi MIX 3 no es el primer smartphone del mundo con capacidad de 10 GB, un título que le arrebató unos días antes su hermano, el Xiaomi Black Shark Helo.
A día de hoy es complicado aprovechar esos 10 GB de RAM, pero Xiaomi dice que es una apuesta para asegurar el rendimiento en el futuro. Y, aunque esto no lo han reconocido, también es un argumento de marketing potente.
Por otro lado, los 128 o 256 GB de almacenamiento interno parecen suficientes, a pesar de que no incluya ranura para microSD.
El Qualcomm Snapdragon 845 asegura uno de los mejores rendimientos de la gama alta Android y así lo hemos comprobado en nuestras primeras pruebas. Se mueve muy fluido, no hay latencias de ningún tipo, aunque esto es algo que probaremos a fondo en nuestra review.
Lo que me ha parecido algo escasa es la capacidad de batería. Esos 3200 mAh para una pantalla de casi 6,4 pulgadas, AMOLED, un sistema "raro" para desplegar la cámara frontal, etc. creo que pueden quedarse justos. En cualquier caso, lo comprobaremos en nuestro análisis.
En este apartado hay que apuntar que, además del cargador del smartphone, en el pack del Mi MIX 3 se incluirá un cargador inalámbrico de 10W.
Hay que señalar también que nos han asegurado que la versión internacional del dispositivo será compatible con 5G, al menos en Europa. Aunque, claro, para ello hará falta que algún operador ofrezca 5G primero.
Cámaras que se visten con "inteligencia artificial"
Las cámaras traseras son exactamente las mismas que las del Mi 8, así que la única novedad que introduce Xiaomi en ellas son las funcionalidades de lo que denominan inteligencia artificial, una palabra de moda a la que gran parte de los fabricantes de smartphones se han querido aferrar.
Esas mismas funcionalidades también están disponibles en las cámaras frontales. ¿Qué ofrece esta IA aplicada las cámaras? Por lo que hemos podido probar, se incluyen varias características nuevas. Un modo en el que te calcula la edad y el género (esto no es nuevo) según tu cara, y otro, llamado 'Magic Mirror', en el que el teléfono va poniendo nota al selfie que te estás haciendo. Según he podido comprobar, le gustan los selfies con buena luz y una perspectiva elevada, aunque tendremos que probarlo bien para pillarle el truco.
En teoría, esta IA también servirá para detectar escenas y para otros usos como la grabación de vídeo con efecto bokeh aplicado. Tendremos que probarlo a fondo para saber si estas utilidades son interesantes o no.
Por cierto, el Mi MIX 3 es capaz de grabar a super slow motion 960 fps a 1080p y 720p, aunque no tiene chip de DRAM integrado, por lo que, en teoría, la calidad será algo menor a lo que pudimos comprobar con el Note 9 o el Xperia XZ2.
Por último, cuenta con un modo noche que nos aseguran que funciona muy bien. Saldremos de dudas en la review.
Pantalla y software
El salto al AMOLED en el Mi MIX 3 se nota, y mucho. Ya que farda de ratio de pantalla, es lógico que cuiden este aspecto para poder disfrutar de más calidad en el contenido multimedia.
En lo que he podido ver, el teléfono muestra unos colores muy vivos, tiene un brillo adecuado (nos ha faltado poder probar bien exterior a ver qué tal) y esa resolución de Full HD+ es más que suficiente para ver películas, series o jugar a videojuegos. Incluye Gorilla Glass 5.
En el apartado de software es quizá donde Xiaomi tenga más margen de mejora. Aunque incluye la versión de su capa de personalización más reciente, MIUI 10, viene preinstalado con Android 8. Hemos preguntado por esto y nos aseguran que en un plazo máximo de dos meses y medio (a partir de ahora) el Mi MIX 3 recibirá Android 9 Pie.
Finalmente, parece que ese botón dedicado para el asistente tendrá una funcionalidad interesante para la versión internacional del MIX 3. Según nos han confirmado, están trabajando con Google para incorporar Google Assistant, aunque nos dicen que su asistente Xiao AI estará pronto disponible en inglés, francés o español.
Otro gran pez en la pecera
Si quieres comprarte un smartphone de gama alta, tienes más opciones que nunca y lanzamientos como el del Xiaomi Mi MIX 3 complican todavía más la decisión.
Es indudable que su hoja de especificaciones es brutal, y en nuestra primera toma de contacto la cosa promete, pero todavía no podemos aventurarnos a más con estas primeras impresiones. Tampoco conocemos qué versiones llegarán al mercado internacional, ni qué precio tendrán fuera de China, por lo que quizá sea pronto para juzgar si merece la pena su compra o no.
Sabemos que, al cambio de lo anunciado en China, los precios serían unos 420 euros en la versión más básica y unos 620 euros en la versión top. Contando con que tendrán aranceles, impuestos, etc. es posible que los precios finales se acerquen más a los 500 y 700 euros respectivamente, aunque, como decimos, aún no hay nada oficial.
Lo que está claro es que, a este paso, no nos van a caber más tiburones en la pecera.