Nexus 6P, análisis: el mejor Nexus ha vuelto para ganar a cualquiera

Google sorprendió el año pasado a todos apostando de lleno por un Nexus que rompía con todo lo anterior. El Nexus 6 era más caro y claramente un terminal de nicho por sus 6 pulgadas de diagonal.

El gran Nexus de este año hereda el número seis pero cambian bastantes cosas. El Nexus 6P no debe confundirte porque es sobre el papel mucho mejor terminal que el del año pasado y potencial competidor para cualquier Android que se ponga delante de él. En Xataka ya lo hemos probado a fondo y te dejamos con la review completa del Nexus 6P.

Nexus 6P, principales características

Desde hace una una generación los Nexus más grandes son representantes orgullosos de la gama alta Android. Este Nexus 6P lo corrobora con una ficha técnica contundente en cada uno de sus apartados. Veámoslo resumido en su hoja de especificaciones:

El Nexus 6P ya se puede comprar a partir de 649 euros, un precio clásico ya en esta gama alta. Está disponible en tres tonos (aluminio, grafito o blanco nieve). En nuestro caso hemos probado la unidad en aluminio y nos ha gustado mucho.

En la caja, cuadrada y bien pensada, encontramos de serie el terminal, los clásicos manuales e información sobre garantías, así como la herramienta para abrir la bandeja de la nanoSIM, un cargador USB tipo C de 15 W (5 V/3 A) y dos cables USB tipo C. Uno de ellos es de tipo C a tipo C y el otro de tipo C a tipo A estándar. Como te contaremos ahora, cuídalos nada más sacarlos de la caja porque son muy preciados hoy en día.

Y si optas por proteger el terminal, algo que no deberías hacer porque perdería buena parte de su atractivo físico, hay diferentes opciones de fundas oficiales y de terceros de todo tipo, desde las más básicas hasta las de tipo cartera que tan de moda están entre cierto público, quizás no el potencial de este Nexus 6P.

Nosotros recomendaríamos la oficial, que nos gusta por diseño, por encajar en el terminal como un guante (incluyendo el correspondiente hueco para el lector de huellas trasero) y por su precio no muy exagerado: 35 euros.

Un diseño y acabado muy difícil de mejorar

Hay que ver qué bien le ha sentado a Google que haya sido Huawei la compañía encargada de la fabricación de este Nexus 6P. El historial de la marca china a nivel de diseño y acabado nos ha ido dejando alguna que otra perla a lo largo de estos años, especialmente en el formato pablet. Y todo ese aprendizaje lo ha plasmado de forma magistral en el diseño y acabado del Nexus 6P.

En nuestras primeras impresiones comentábamos las dudas sobre el modelo acabado en blanco al transmitirnos la idea en un primer contacto de que no era un acabado metálico. O al menos no lo parecía. La unidad que he probado es la que tiene tono aluminio y os puedo asegurar que el acabado es excelente y se suma a un diseño elegante.

El aluminio anodizado es de primera y el cuerpo de una sola pieza, la unión de frontal de cristal con unos magníficos marcos metálicos nos transmiten una idea completa y sin dudas de que hay un acabado premium que no había tenido nunca un Nexus. De hecho tras esta semana de uso me ha parecido el mejor acabado de un smartphone de Android que ha pasado por mis manos.

El tacto del terminal es exquisito y nos transmite al mismo tiempo la sensación de acabado noble, pero sin renunciar a ser robusto y resistente.

En mano el Nexus 6P es muy cómodo. Todo lo que puede ser un phablet de 5,7 pulgadas. No es el más ligero del mercado, pues pesa casi 180 gramos, pero no es excesivamente ancho y eso facilita mucho el agarre. El grosor de poco más de 7 mm nos parece muy conseguido y colabora junto con la relación tamaño-peso ideal para que nos sintamos muy cómodos manejándolo, aunque necesitarás las dos manos para hacerlo con soltura en la mayoría de las situaciones.

Huawei no ha descuidado ningún detalle y por ejemplo los botones físicos, todos en el lateral derecho, tienen muy buen tacto y acabado también metálico. El de encendido y bloqueo, con recorrido perfecto, está bien situado en el centro del lateral pero quizás elevado respecto a la que para nosotros sería la colocación ideal. Debajo de él tenemos los controles de volumen. A destacar el patrón rayado del botón de inicio que nos lo identifica al tacto de inmediato.

Del diseño llama poderosamente la atención la banda superior donde va alojada la cámara principal y el flash doble. Esa cámara sobresale ligeramente pero ni lo parece a la vista ni mucho menos al tacto. Huawei lo ha integrado en una protuberacia que abarca todo el ancho del terminal y le ha dado un diseño diferente con protección Gorilla Glass 4, la misma que la pantalla, aprovechando además para incluir la cámara, el flash doble, las antenas, la conectividad NFC y el sensor de enfoque por láser.

La buena noticia es que esa parte que sobresale ligeramente ha sido integrada en el diseño de manera que colocando boca arriba el terminal, no hay problema alguno en usar la pantalla ya que no hay vaivén del terminal ni balanceo de ningún tipo. Ni lateralmente ni longitudinalmente.

El resto de la trasera es la parte metálica del terminal, de una sola pieza y unido de forma continua con el marco. Solo el logo de Nexus bien visible y el círculo para identificar el sensor de huellas rompen esa continuidad. El resto de conexiones son el puerto de auriculares de 3,5 mm en la parte superior y el puerto de carga microUSB (de tipo C) en la inferior.

Por último decir que en el frontal destacan los dos altavoces estéreo que le otorgan un diseño quizás demasiado simétrico. Será más de una vez cuando lo saques del bolsillo o cojas de la mesa sin tener muy clara la orientación correcta para iniciarlo. Esos altavoces penalizan ligeramente la proporción de dimensiones-pantalla, pero creo que compensan por la calidad del sonido que podemos obtener con ellos.

De todo lo dicho en este apartado sobre el diseño y acabado del Nexus 6P tan solo echamos de menos la resistencia a las salpicaduras. Ya no hace falta que deba ser sumergible, no es un uso que se dará a este tipo de terminales, pero que al menos se disponga una capa de protección en caso de accidente con agua hubiera redondeado el diseño de este Nexus 6P.

Una pantalla a la altura del terminal

Hoy en día, apostar por una pantalla AMOLED en un terminal de gama alta es arriesgado. La referencia la establece Samsung con sus SuperAMOLED de los Note y Galaxy S6 y es complicado quedar a la altura. Lo es salvo que sea la propia Samsung la encargada de proporcionarte sus paneles de última generación para su smartphone.

Es lo que le ha ocurrido a Google y Huawei, que colocan un panel de 5,7 pulgadas, como el del Note 4, y les sale bien la jugada. La pantalla del Nexus 6P ofrece todo lo que hemos visto hasta ahora con paneles AMOLED de alto nivel: brillo poderoso, colores llamativos pero con calibración correcta y una nitidez que sobrepasa incluso lo lógico en estas diagonales. El panel del Nexus 6P tiene resolución 1440p y nos ofrece más de 500 ppp de densidad.

Un apunte: por defecto, este Nexus 6P no permite modificar el modo de pantalla, pero si la saturación de las pantallas AMOLED no van contigo, hay un modo más contenido (sRBG) que podemos activar si "abrimos" las opciones de desarrollo. Para hacerlo hay que ir a Ajustes --> Información del teléfono y en número de compilación, pulsar siete veces seguidas. Listo.

En términos generales la pantalla del Nexus 6P es una gozada para la vista cuando nos acercamos. También lo es en exteriores cuando regulamos el brillo al máximo (en manual obtenemos un plus que se agradece), aunque un paso por detrás de paneles IPS con brillo rompedor, pero agradecido por el cristal delgado Gorilla Glass 4 que le ha colocado Huawei y que reduce considerablemente los reflejos de la pantalla tanto en interiores como en exteriores. En cuando al sensor de luminosidad, responde muy rápido y los ángulos de visión son aceptables.

Una peculiaridad que Google y Huawei han incluido en este Nexus 6P era Ambient Display, algo que nos encantó al probar los últimos Motorola. Esta tecnología activa la pantalla cuando recibimos una notificación así como cuando cogemos el terminal bloqueado. Aquí se nota bastante que no está tan afinado el funcionamiento como en los terminales de Motorola y esto hace que pierda parte de su atractivo.

Cuando el Nexus 6P está sobre la mesa, las notificaciones sí que provocan siempre la activación de la pantalla para echar un vistazo a lo nuevo que ha llegado, pero el sistema no funciona de forma tan fiable cuando cogemos el Nexus 6P con la mano. En los Motorola el encendido de la pantalla era instantáneo y con un altísimo grado de acierto. En el modelo de Huawei y Google es algo inconsistente y debe ser un movimiento bastante enérgico el que realicemos al coger el terminal de la mesa para que ese adelanto de lo que nos acaba de llegar o se ha ido acumulando en las notificaciones de la pantalla de inicio se muestren.

Android puro y lo mejor en hardware: combinación ganadora

Pocas concesiones se ha permitido Huawei para el interior del nuevo Nexus 6P de Google. Sin posibilidad de escoger los Exynos de Samsung ni los A9 de Apple, líderes en rendimiento de este año, le quedaba la opción arriesgada: los Snapdragon 810 de Qualcomm.

Los ocho núcleos a 2 GHz y los 3 GB de memoria RAM de tipo LDDR4 son combinación que está arriba en rendimiento de forma absoluta gracias a la colaboración de un Android limpio y ligero, pero también plantea escenarios en que el calor es más evidente que con otras soluciones. No es nada alarmante pero está presente.

El día a día con el Nexus 6P nos ha dejado una de las mejores sensaciones de fluidez de todo el año en terminal de gama alta bajo Android. No hay "lag" alguno y las transiciones, multitarea o cualquier acción que realicemos es instantánea. En las pruebas con programas de benchmarks estos han sido los resultados que hemos obtenido: