Cuando me preguntan cuál es mi auricular favorito lo tengo bastante claro en el formato de diadema. Con los auriculares completamente inalámbricos tengo más problemas. Hay muchas opciones, pero casi todas fallan en algo. No hay un modelo que diga este sí, este tiene todo lo que necesito y además se vende a un precio competitivo.
Durante todo este mes he estado probando los nuevos JBL Tour Pro 3 y debo anticiparos que se han convertido en mis nuevos auriculares TWS de referencia para trabajar y viajar. Hay modelos más compactos, hay modelos con un sonido más perfilado y hay modelos más económicos, pero el equilibrio que ofrece JBL con estos Tour Pro 3 es de primera línea. Os cuento por qué.
JBL Tour Pro 3, especificaciones técnicas
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JBL Tour Pro 3 |
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peso |
Auricular: 5.6g Estuche de carga: 71,8 g |
base de carga |
Pantalla 1,57" LED a color |
altavoz |
Driver dinámico de 10,2 mm Driver plano de 5,1 x 2,8 mm |
sonido |
Hi-Res Audio 24 bits Audio 360 multicanal (HeadTracking) Sensibilidad: 104 dB Respuesta en frecuencia: 20 - 40.000 Hz |
cancelación de ruido |
Cancelación de ruido activa Sonido ambiente Detección de voz |
batería |
Auricular: 65 mAh Estuche de carga: 850 mAh |
conectividad |
Bluetooth 5.3 AAC LDAC Auracast Google / Microsoft Fast Pair |
sensores |
6 micrófonos Toque Acelerómetro Captación de voz |
otros |
IPX5 |
precio |
299,99 euros |
La proporción justa entre diseño y ergonomía
Los JBL Tour Pro 3 son unos auriculares contundentes. No son del estilo ultralivianos como los Galaxy Buds 3 Pro o los propios JBL Live Beam 3. Pero lo más llamativo es que no se antojan tan grandes cuando nos los colocamos.
Tienen una forma curiosa, con una almohadilla intraural que permite aislar el ruido de forma efectiva. Luego una pata corta y bastante plana y finalmente un cuerpo del auricular considerablemente más gordo que el resto pero que no provoca que el auricular sobresalga en exceso de la oreja.
Digno de mención es la calidad de los acabados. Aquí los Tour Pro 3 se nota que pertenecen a la gama más alta del fabricante y están rematados con cuidado. Encontramos multitud de detalles en el auricular, desde el logo de JBL hasta el de Tour, pasando por zonas metalizadas, un LED que si está apagado es imperceptible y cavidades para los micrófonos.
Colocarse los Tour Pro 3 es super rápido. No son de esos auriculares que tienen formas tan simétricas que en ocasiones los ponemos mal. La superficie de los auriculares también es suficiente ancha como para que el control por toque de los gestos sea muy efectivo. A nivel de uso, mientras que en otros auriculares hay que tocar varias veces para que nos hagan caso, con estos JBL a la primera tenemos la respuesta.
La comodidad es muy buena y la presión auditiva de las almohadillas es bastante baja. Temía por el agarre pero tras unas semanas debo decir que ha cumplido con nota. No son para hacer ejercicio, pero en el día a día y si vamos andando por la calle no tendremos problemas. Muy contento con ellos y excelentes para ir escuchando música durante horas.
Esto de la pantalla en la base de carga tiene su punto
Estuve probando durante semanas los JBL Live 3 pero debo decir que no terminé de aprovechar del todo la pantalla que se añade en la base de carga. Todavía tengo mis dudas, pero estas últimas semanas me he ido adaptando a tenerla y lo cierto es que cuando he vuelto a otros auriculares TWS sin pantalla, la he echado de menos. En la práctica esta pantalla nos permite utilizar menos el móvil. Y todo lo que sea desengancharnos del teléfono en nuestro día a día es bueno.
La pantalla de la base de carga del JBL Tour Pro 3 ha sido rediseñada. Ahora tiene mejor color, más brillo, mejor respuesta táctil y es ligeramente más grande, hasta alcanzar las 1,57 pulgadas. Desde ella podemos mirar el tiempo, establecer alarmas, ver la batería de los auriculares, cambiar de canción y también ver el grupo y la canción que está sonando en este momento. Esto último no lo teníamos antes y es una tontería muy útil cuando tienes Spotify sonando todo el día y quieres saber cuál es esa canción que no conocías y te está gustando.
No es una base de carga pequeña. Pero para su tamaño pesa poco. Es fácil de abrir y tanto colocar como quitar los auriculares es muy rápido. No es una base de llevar en el bolsillo, sino de colocar al lado del ordenador e ir trasteando con ella de vez en cuando.
En la parte inferior tenemos un conector USB-C que además de permitir cargar la base también actúa como transmisor auxiliar. Podemos conectar por ejemplo la base de carga con el jack de 3,5 mm del portátil y tenerlos conectados inmediatamente de manera inalámbrica. Con algo de latencia, pero muy útil para cuando no queremos complicarnos o enlazar los auriculares. También tenemos un botón de Auracast para conectarse con la tele u otros dispositivos cercanos.
JBL tiene la experiencia de uso más completa
Utilizar los JBL Tour Pro 3 es un lujo. Es sencillo y super personalizable a nuestros gustos. No es algo específico de estos auriculares, pero con ellos alcanza un nivel superlativo. Seguramente no nos equivoquemos si decimos que JBL tiene el mejor software para auriculares del mercado. Ninguna marca se asemeja. Algunas tienen una app con muchas opciones, otras con mejor diseño... pero este nivel de ajustes y organización no lo hemos visto.
La aplicación de JBL Headphones está disponible tanto en Android como en iOS. Configurarla es tan sencillo como emparejar los auriculares por Bluetooth, abrir la aplicación y elegir el modelo que tenemos. Y ya está.
Los JBL Tour Pro 3 cuentan con Google Fast Pair y Microsoft Fast Pair, una función que a la que te acostumbras ya no quieres volver atrás. Es un emparejamiento automático, como ocurre con los AirPods y los iPhone, pero sin depender de la marca. Con estos JBL es abrir la base de carga y ya los tenemos conectados con el móvil si previamente los habíamos emparejado. Otros auriculares dan fallos para enlazar, con los JBL Tour Pro 3 no hemos tenido ningún problema. No debería ser algo especial en la gama alta, pero lamentablemente no siempre se da este caso.
La aplicación se divide en tres apartados: General, audio y otros. En primer lugar tenemos para ajustar el control de sonido ambiental entre cancelación total, sonido ambiental o conversación. Una opción interesante es que en esta última podemos configurar el tiempo en que se activa el 'TalkThru', bajando el volumen automáticamente cuando hablamos. Es genial poder además configurar el nivel de intensidad de la cancelación.
También podemos configurar la base de carga desde aquí, teniendo desde cambios en el brillo hasta el fondo de pantalla de bloqueo, pasando por accesos directos o el idioma, así como una opción para encontrar la base de carga, en caso que la hayamos perdido por casa. Una opción también aplicable a los propios auriculares.
Los gestos son muy configurables, teniendo la opción de tocar, doble toque o mantener el toque. Y como decíamos antes, el control por gestos es excelente.
A nivel de personalización del sonido tenemos un ecualizador completo y sonido espacial 360 adaptativo, donde podemos ajustar en base a nuestros movimientos de cabeza. JBL también ha actualizado Personi-Fi a la tercera versión, un sistema de pruebas auditivo que parametriza los sonidos graves, medios y agudos que somos capaces de escuchar para ajustar el sonido en base a nuestro oído.
En cuanto a las llamadas, los JBL Tour Pro 3 incorporan tres micrófonos en cada auricular, uno interior para la cancelación de ruido y dos exteriores para el sonido ambiente y el modo 'TalkThru'. Y el resultado es cristalino. La detección de cada situación es excelente y la voz se transmite claramente, según me describen quien ha hablado conmigo mientras los tenía puestos.
Autonomía: lo bueno de tener tanto espacio
La autonomía de estos JBL Tour Pro 3 es sensacional. No podía ser de otra manera por su tamaño. JBL tiene espacio para colocar una buena batería y se nota. Los auriculares disponen de 65 mAh y el estuche de carga de unos generosos 850 mAh. En comparación, los Galaxy Buds 3 Pro tienen 53 mAh y 515 mAh respectivamente.
¿Cómo se traduce esto en horas de uso? Claramente depende del modo, pero nuestra sensaciones después de varias semanas de uso es que estamos ante uno de los auriculares con mejor autonomía que hemos probado, a la par de los WF-1000XM5 que es de lo mejor que conocíamos.
En un par de pruebas, hemos conseguido alcanzar casi 8 horas de uso con la cancelación de ruido activa. Una barbaridad. De sobra para una intensa jornada de trabajo.
Según los datos oficiales de JBL, los Tour Pro 3 ofrecen hasta 11 horas sin cancelación de ruido y un total de 44 horas con la base de carga. En nuestra experiencia creemos que se cumple con creces.
La base de carga permite recargar por completo los auriculares unas cuatro veces. La semana que los utilizamos de manera más intensiva solo tuvimos que cargar la base una vez. Y además hay que destacar lo rápido que se carga a través del USB-C. Con 15 minutos de carga tenemos para toda una mañana escuchando música de nuevo. Si bien, para completar la base de carga por completo necesitaremos unas dos horas.
Sonido top y gran cancelación de ruido
Los JBL Tour Pro 3 cuentan con drivers duales en cada auricular. Tenemos el equivalente a un driver dinámico de 11 mm, con un driver principal de 10,2mm y un driver plano a modo de armadura para mejorar los tonos agudos y la claridad.
Respecto a la generación anterior, los JBL Tour Pro 3 han dado un salto de calidad y ya ofrecen sonido certificado de alta resolución HiRes, además de ser compatibles con LDAC, el código de alta resolución de 24 bits.
Durante estas semanas hemos combinado distintas formas de probar el sonido de estos auriculares. Siempre me baso en las canciones que más tengo escuchadas, aquellas en las que podemos percibir mejor las diferencias entre auriculares. Principalmente he utilizado los JBL Tour Pro 3 con Spotify, la aplicación de streaming más común. Si bien para comprobar hasta dónde son capaces de llegar he utilizado pistas FLAC y Tidal.
Estos auriculares tienen un nivel excelente. El sonido es muy, muy limpio a cualquier volumen y además disponen de una gran pegada, algo que en los completamente inalámbricos no es tan habitual de encontrar. Particularmente los tonos graves considero que están muy conseguidos.
Se agradece contar con un ecualizador y tantos modos para adaptar la música a nuestros gustos. Al principio puede llegar a abrumar, ya que entre el ecualizador y los ajustes óptimos que aplica JBL puede cambiarnos bastante la experiencia. Una vez lo tenemos afinado a lo que nos gusta, el resultado como decimos es top. Fácilmente entre el top 3 de mejor sonido en unos auriculares TWS hoy en día.
Todo sea dicho, aunque el dinamismo y la claridad de los JBL Tour Pro 3 es sensacional, creemos que tampoco han dado un golpe en la mesa para situarse claramente por delante de los modelos top de Sony, Bose o Technics. Entendible por otro lado, ya que en estos niveles la diferencia de calidad de sonido entre unos y otros es muy pequeña.
Con la cancelación de ruido también tenemos una buena experiencia, aunque aquí JBL tiene algo más de trabajo para acercarse a los principales referentes. Si utilizamos la cancelación de ruido total el bloqueo del ruido externo es casi completo. Dentro de la oficina no escucharemos nada y por la calle la sensación de vacío es muy buena. Los hemos podido utilizar en un único viaje de ida y vuelta en avión y el resultado ha sido aceptable. El sonido de las turbinas sí se amortiguaba lo suficiente, pero nos habría gustado un aislamiento total.
Más allá de la cancelación total, JBL tiene el modo ambiente que se adapta en tiempo real en función del sonido externo que haya presente. A nivel de adaptación funciona correctamente y varía con suficiente rapidez en cada momento, aunque el sonido se resiente ligeramente.
JBL Tour Pro 3, la opinión y nota de Xataka
Los JBL Tour Pro 3 se han convertido en mi primera opción. Me gusta más su diseño y me siento más cómodos con ellos que no con los Sony; no tienen la limitación de marca de móvil de los Samsung o los AirPods de Apple. Su aplicación móvil está a años luz de la de Bose o Panasonic. Estos JBL Tour Pro 3 destacan especialmente y son recordados como los auriculares de la pantalla táctil, pero en realidad si los podemos recomendar es porque tienen un nivel super alto en todos los apartados. No hay ningún punto donde estén por debajo de las expectativas. En todos los aspectos cumplen.
La sorpresa con estos auriculares está en la base de carga. En ese estuche que sí, es grande, pero nos hemos encontrado utilizándolo casi constantemente. No tenemos claro todavía que recomendemos pagar por esa pantalla, pero sí que merece bastante la pena si la tenemos.
A este divertido accesorio hay que sumarle un sonido sensacional, una cancelación de ruido notable y una autonomía sobresaliente. Un producto redondo que quizás sus competidores pueden mejorar en apartados concretos, pero no en su conjunto. Los JBL Tour Pro 3 estarán disponibles a partir del 14 de septiembre y su precio será de 299,99 euros.
8,9
A favor
- Utilizar los JBL Tour Pro 3 es genial con tantas opciones: desde la pantalla táctil hasta los gestos, pasando por una experiencia sin fallos
- La construcción y los acabados son top
- Sonido a un nivel muy alto, con buena pegada y para sacar partido de la alta resolución
En contra
- Aunque funciona muy bien, la cancelación de ruido sigue sin ser referente
- No son ultralivianos. Y la base de carga menos
- Todavía no estamos convencidos que la pantalla táctil sea diferencial
Imágenes | Xataka
Este dispositivo ha sido cedido para prueba por parte de JBL. Puedes consultar cómo hacemos las reviews en Xataka y nuestra política de relaciones con empresas.