Habemus Xperia Z3. Guste más o guste menos la tendencia a ofrecer dos franquicias al año, en Sony han pensado que mejor ir a la campaña de navidad con novedades y el gama alta actualizado que volver a esperar varios meses y que esta temporada les toque sufrir ante los Note 4 o iPhone 6.
Del equipo ya os hemos destripado todas las características técnicas y las novedades respecto al Z2. En estas primeras impresiones vamos a intentar discernir si esas variaciones se perciben sustancialmente en la primera aproximación al dispositivo.
De entrada hay que apuntar que Sony sigue en su línea de adelgazamiento. Sobre todo el Z3 es sensiblemente más fino, sin renunciar al sensor para la cámara con el que posicionan al equipo como móvil fotográfico por excelencia, siguen siendo más gruesos que los mejores de la competencia, aún consiguiendo acortar las distancias.
Menos marco, más ligero y más fino, pero el Z3 no acaba de romper con el teórico desperdicio de espacio que supone la parte inferior y que provoca que para la pantalla que monta (5.2 pulgadas) el teléfono siga resultando más grande que sus competidores y se mantenga en los 154 gramos.
Sony se mantiene en FullHD: apuesta por autonomía frente a resolución
En cuanto al resto de variables, destacar que empezamos a encontrar curvas (las esquinas del teléfono, las aperturas para SIM o microSD) que restan agresividad al diseño de la línea Z, marcado hasta ahora por las rectas.
Sobre la pantalla hay dos temas a destacar: han decidido mantenerse en los 1080p y no saltar a 2K como hizo LG con G3, priorizando la autonomía frente a la resolución; el segundo tema es que Sony presume de haber mejorado rendimiento en exteriores y de paso lograr un menor consumo energético del móvil.
En las primeras impresiones – hemos pasado no más de 30 minutos con el terminal – no vamos a poder concluir si ambos objetivos están logrados: nuestras pruebas han sido en interior y necesitaremos varios días para valorar ese aspecto de la autonomía.
En fotografía no debería haber grandes cambios respecto a Z2: el sensor ha adelgazado y las únicas novedades es que puede disparar a un ISO más alto (que nos debería ayudar en que en condiciones de baja luz no nos salgan tan movidas las fotos, aunque habrá que ver el precio de cuánto grano añaden) y nuevos modos de fotografía con realidad aumentada (una versión con esteroides de su app para meter dinosaurios en las fotos)... además de uno muy interesante para “controlar” a otros Xperias (o una cámara Sony con Wifi) y hacer un vídeo a partir de lo captado por hasta tres cámaras.
Lo hemos sumergido – ahora ha pasado a IP 68 – pero sobre todo nos ha gustado que ahora es más llamativo cuando dejas uno de los compartimentos (carga, SIM) abierto al no identificarse con el borde del teléfono.
Autonomía, fotografía y, no lo dejaría en absoluto de lado, la integración con PS4 son las grandes asignaturas para el Z3 que dejamos para el análisis a fondo que lo antes posible traeremos a Xataka.