Hablar de Mi Band es hacer referencia a uno de los accesorios para móviles más vendidos del mundo, también alude a una gama muy prolífica. Y con la Mi Band 5 Xiaomi ha conseguido evolucionar su 'wearable' hacia el lado más deportivo; sin perder dos de sus virtudes: ser suficientemente económica y versátil, lo hemos comprobado.
Llevar el recuento de pasos, calorías, disponer del reflejo de las notificaciones del móvil en la muñeca y despertarnos con la vibración de la pulsera son tareas habituales que se hicieron muy asequibles con la irrupción de Xiaomi en el mercado de las pulseras de actividad. Fiel a su renovación constante, el modelo más actual, denominado como Xiaomi Mi Band 5, está ya a la venta en España. Y hemos pasado un tiempo con ella para descubrir sus ventajas e inconvenientes, también para saber si vale la pena o no comprar este modelo o el anterior.
Ficha técnica de la Xiaomi Mi Band 5
XIAOMI Mi Band 5 |
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PANTALLA |
OLED a color 1,1 pulgadas |
SENSORES |
Frecuencia cardíaca |
RESISTENCIA AL AGUA |
5 ATM |
AUTONOMÍA |
Batería de 125 mAh |
CONECTIVIDAD |
Bluetooth 5.0 |
COMPATIBILIDAD |
iOS y Android |
OTROS |
Reconocimiento de 11 deportes Carga magnética Modo de salud femenina Control remoto para hacer fotos |
PRECIO |
39,99 euros |
Xiaomi Mi Band 5 - Smart Fitness Bracelet Black
Un diseño demasiado conocido
Mirar la nueva pulsera implica un claro déjà vu porque su aspecto es prácticamente calcado al de la Xiaomi Mi Band 4; que a su vez era muy parecido al de la Xiaomi Mi Band 3. La marca no se ha complicado mucho en este aspecto, ni en el diseño ni tampoco en la elección de los materiales: plástico para la pastilla o componente principal, cristal para la superficie de la pantalla y poliuretano termoplástico (TPU) para la correa.
Tener un diseño prácticamente calcado a anteriores modelos puede suponer una desventaja, pero también es digno de agradecimiento. Por un lado, no hay por qué cambiar un aspecto que funciona; por el otro, pueden aprovecharse las correas de modelos anteriores. Eso sí, la Mi Band 5 tiene la guía que rodea el contorno de la pastilla algo más gruesa que la Mi Band 4, por lo que habrá correas que no terminen de encajar a la perfección.
La Xiaomi Mi Band 5 continúa contando con dos elementos: el dispositivo electrónico propiamente dicho o 'pastilla' y la correa. El primero encaja en la segunda impidiendo que pueda escaparse. Además, Xiaomi mantiene el cierre habitual en este dispositivo: enganche de aluminio que ofrece una sujeción segura a menos que se le pese un fuerte estirón a la pulsera.
Xiaomi mantiene la ligera protuberancia para los sensores PPC del ritmo cardíaco, también el conector de pines para recargar el dispositivo en la parte inferior de la cara trasera. Pero ahora no hay que separar los elementos para colocar la Mi Band 5 en el cargador: un nuevo conector magnético facilita la tarea de cargar el accesorio. Basta con acercar el extremo de carga, incluido con la Xiaomi Mi Band 5, y este se adhiere al dispositivo en la posición justa. Sin duda es lo mejor del nuevo modelo.
El tamaño y el peso se mantienen en la línea de este tipo de dispositivos: una vez colocada en la muñeca la Xiaomi Mi Band 5 se hace casi invisible. Sí es algo gruesa, pero eso no cambia con respecto a los anteriores modelos. Sólo está disponible el color negro para la pastilla; con casi infinitas opciones dependiendo de la pulsera que se elija, tanto oficiales como de otras empresas.
Más superficie de pantalla y mayor nivel de brillo
A simple vista no se ven diferencias significativas en la pantalla de la Xiaomi Mi Band 5 con respecto al modelo anterior, la Mi Band 4. La superficie crece hasta las 1,1 pulgadas (desde las 0,95 pulgadas) aumentando su resolución hasta los píxeles 126 x 294 píxeles (desde los 120 x 240 píxeles). La tecnología elegida es OLED, un tipo de panel que muestra muy bien los colores, ofrece alto contraste para así visualizar los datos en pantalla y también permite la lectura hasta con la luz directa incidiendo sobre la Mi Band 5.
XIAOMI Mi Band 4 | XIAOMI Mi Band 5 | REALME BAND | HUAWEI BAND 4 | |
---|---|---|---|---|
PANTALLA | OLED 0,95" táctil | OLED 1,1" táctil | OLED 0,96" táctil | TFT 0,96" táctil |
PESO | 22,1 gramos | 22 gramos (estimado) | 20 gramos | 24 gramos |
BATERÍA | 135 mAh | 125 mAh | 90 mAh | 91 mAh |
CONECTIVIDAD | Android 4.4 / iOS 9.0 o superior | Android 5.0 / iOS 9.0 o superior | Android 5.0 o superior | Android 4.4 / iOS 9.0 o superior |
RESISTENCIA | Hasta 50 metros bajo el agua | Hasta 50 metros bajo el agua | Hasta 1,5 metros bajo el agua | Hasta 50 metros bajo el agua |
OTROS |
Acelerómetro y giroscopio (seis ejes) |
Acelerómetro y giroscopio (seis ejes) |
Acelerómetro (tres ejes) |
Acelerómetro (tres ejes) |
PRECIO | 34,99 euros (26,54 euros) | 39,99 euros (36,80) | 24,99 euros (19,90 euros) | 39 euros (24 euros) |
No hay problemas para ver qué muestra la pantalla en exteriores: la Xiaomi Mi Band 5 posee un brillo más que suficiente (450 nits según la marca) dividido en cinco niveles. El problema viene para ajustar dicho brillo: pese a que es un valor que debería encontrarse más accesible, Xiaomi esconde la configuración dentro del menú 'Ajustes'; lo que obliga a dar un paseo por la interfaz para adaptar manualmente la pulsera a las condiciones externas de luz. Esta opción no es automática y sólo puede hacerse desde la pulsera: no vale la app Mi Fit en el móvil.
La pantalla de la Xiaomi Mi Band 5 está protegida por cristal templado (puede rayarse con facilidad, no es mala idea comprar un protector), es táctil, ofrece gran cantidad de información gracias al formato vertical del panel (la lectura de notificaciones está muy bien conseguida) y posee un pequeño botón táctil debajo, y con forma de círculo, que permite retroceder al menú anterior. Cuesta un poco hacerse con el control de los menús, sobre todo si no se ha usado antes una Mi Band.
Sensores para calcular la salud y la actividad en todo momento
La Xiaomi Mi Band 5 incluye lector de ritmo cardíaco con sensores PPG, implementa un sistema de acelerómetro de tres ejes, un giroscopio de otros tres ejes, se conecta al teléfono con Bluetooth 5.0 BLE y dispone de un motor de rotación para los avisos y el despertador. Este conjunto de sensores se basta y se sobra para medir en todo momento los pasos, las brazadas en natación o el número de saltos a la comba, por poner algunos ejemplos deportivos.
La pulsera es capaz de medir constantemente el ritmo cardíaco con una frecuencia máxima de una vez cada minuto en segundo plano; permitiendo la lectura continua durante la práctica deportiva. Dicha lectura es bastante precisa para un dispositivo de estas características, incluso durante las etapas de alto ritmo cardíaco. Contrastando la eficacia de la Xiaomi Mi Band 5 con relojes como el Apple Watch Series 4 y el Samsung Galaxy Active2 podemos decir que el rango de error es razonablemente pequeño; lo que permite obtener una lectura de pulso cercana a la real. Siempre sin que sea recomendable fiarse de su lectura en caso de problemas cardíacos.
En la detección del movimiento la respuesta también es positiva: la nueva pulsera de Xiaomi no es 100 % fiable en el conteo de pasos (hemos notado una desviación que no suele superar el 5 % con respecto al Apple Watch Series 4 y el Samsung Galaxy Active2), pero se basta para arrojar una cifra suficientemente fiel al final del día.
Resulta posible utilizar los sensores de detección de movimiento para activar la pantalla al girar la muñeca. Este gesto es preciso y rápido: la Xiaomi Mi Band 5 suele detectarlo a la primera y sin errores. Lástima que la marca siga impidiendo la pantalla siempre activa, muy útil en la práctica del ejercicio.
Por último, y al carecer de GPS (lo más habitual en este tipo de pulseras de actividad), el seguimiento de las prácticas deportivas más habituales es casi inútil sin un teléfono conectado. Salir a correr sólo con la pulsera arroja desviaciones de más del 50 % en la distancia recorrida en comparación con un reloj con GPS. Por tanto, y como ya ocurría en las Mi Band anteriores, no es muy útil para salir a correr, andar o montar en bici si no se acarrea también con el teléfono.
No apta para profesionales del deporte, sí para aficionados
El impulso deportivo que da Xiaomi a su nueva pulsera de actividad es notorio: desde una mayor fiabilidad de los sensores a la inclusión de una unidad deportiva y de salud propia: el PAI (en realidad es de AmazFit). De esta forma queda patente la intención de provocar que los aficionados practiquen ejercicio con asiduidad, aunque no a aquellos que precisan exactitud en las mediciones. No obstante, los datos de salud obtenidos son más fiables que en modelos anteriores y no quedan muy lejos en términos de precisión con respecto a relojes inteligentes no especializados en ejercicio.
La principal mejora en la captura de los datos de movimiento es la compatibilidad con 11 modos deportivos dentro del apartado 'Entrenamiento'. Xiaomi los denomina como 'profesionales':
- Correr al aire libre.
- Cinta de correr.
- Ciclismo.
- Ciclismo en interior.
- Caminar.
- Elíptica.
- Máquina de remo.
- Yoga.
- Saltar a la cuerda.
- Natación en piscina.
- Ejercicio.
Cada uno de los modos deportivos hay que activarlos manualmente antes de comenzar su realización. Como decíamos en el apartado de sensores, y dado que la Xiaomi Mi Band 5 carece de GPS, todo el ejercicio al aire libre que implique desplazamiento necesita estar acompañado del móvil para que las distancias sean reales. Salir a correr sólo con la pulsera no sirve de demasiado.
Todos los ejercicios se registran durante la práctica deportiva para reflejarse después en la aplicación Mi Fit. El recuento de datos es bastante detallado y con una precisión media digna de mención para una pulsera cuantificadora. Sobre todo en el registro de las pulsaciones: la Xiaomi Mi Band 5 activa la lectura continua durante toda la práctica deportiva. Y sin que se aprecien caídas de lectura ni siquiera por encima de 170 latidos, algo habitual en el registro cardíaco mediante sensores ópticos.
Un detalle que muestra la precisión en el registro que ha desarrollado Xiaomi es lo bien que captura el recuento de los saltos con el modo de comba: la Mi Band 5 lo clava, incluso durante varios minutos saltando. La precisión en los pasos no es tan buena, pero sí ha mejorado con respecto a anteriores modelos (no hay desviaciones de más del 5 % en largos trayectos).
Si bien el deporte y el movimiento son dos de las claves que apuntan a la mejora de la salud, controlar el estrés colabora en dicha mejora. Y la Mi Band 5 también mide los niveles de estrés: de forma automática y también puntual y desde su menú en la pulsera. Además, el dispositivo también cuenta con un modo de respiración: al activarlo la pulsera nos ayudará a relajarnos y, de paso, a reducir el estrés. Eso sí, no existen los recordatorios de respiración: hay que activarlos desde el menú de la pulsera.
Un último apunte lo merece la medición automática del sueño. La pulsera detecta cuándo nos ponemos a dormir y cuándo nos levantamos; realizando el registro cardíaco de toda la noche para así establecer la salud del sueño. La Xiaomi Mi Band 5 analiza las distintas fases, incluida la REM; dando como resultado una lectura suficientemente precisa y sin que haya que preocuparse de nada más que de consultar la aplicación Mi Fit. Y una novedad que llega con la Xiaomi Mi Band 5: ahora registra automáticamente las siestas.
PAI: el centro de la progresión deportiva
Xiaomi se decidió a incluir la unidad de medida PAI en su nueva Mi Band 5. Este método de controlar la actividad fisiológica del usuario no es nuevo ya que está heredado de Amazfit, el fabricante del pulsera. PAI, de las siglas Personal Activity Intelligence (inteligencia de actividad personal), tiene como meta incentivar el movimiento, mejorar la circulación y minimizar el sedentarismo.
PAI va asociado a la lectura del ritmo cardíaco. El sistema utiliza distintos valores para calcular dicho PAI, incluyendo el movimiento diario y las pulsaciones. También influyen la edad del usuario, su peso y su sexo; todo para obtener un valor que hay que mantener alto durante siete días.
La Xiaomi Mi Band 5 hace uso del PAI para potenciar la actividad del usuario. Cada siete días se restablece el contador. Y hay que procurar elevar los PAI a diario para terminar la semana por encima de los 100 puntos. Por defecto, la interfaz reserva uno de los menús sólo para mostrar el número y la progresión semanal en vías de superar el 100. Dicho registro también queda anclado en la app Mi Fit; junto con la frecuencia cardíaca diaria: si se realiza ejercicio, y se sube con ello las pulsaciones, también se elevará el PAI.
Introducir el PAI en los datos recabados de la pulsera es una buena herramienta de motivación. El número se complementa a la perfección con el objetivo diario de actividad, establecido mediante los pasos. Con estos valores de estímulo, y fuerza de voluntad, resulta posible mejorar la salud en unas cuantas semanas.
Más personalización para la interfaz
Cargar 'watchfaces' o carátulas de reloj no es algo nuevo ya que la Mi Band 4 disponía de esta opción. También resulta posible cambiar el fondo para así personalizar el dispositivo al gusto de cada persona. Es el caso de la esfera que hemos preparado con nuestro fondo de pantalla: gracias a la aplicación Mi Fit resulta posible adaptar el aspecto de la Mi Band 5 fácilmente. Además, Xiaomi incorpora una notable cantidad de esferas; con cierto aire oriental y poco adaptadas para quienes prefieren un estilo más sobrio en su pulsera.
Si bien resulta posible cargar una carátula propia cambiando el fondo a los diseños de reloj establecidos, y subir cualquiera de las esferas que incluye Xiaomi en Mi Fit, la marca ha habilitado la personalización directamente desde la pulsera. Desde la opción 'Pantalla', dentro de los ajustes de la Mi Band 5, resulta posible aplicar una de las esferas por defecto y personalizar sus complicaciones desplazando los elementos entre los pasos, el PAI, ritmo cardíaco, calorías y más valores. Esta posibilidad consigue que la Xiaomi Mi Band 5 sea algo más independiente del teléfono; por más que el número de 'watchfaces' incluido en el hardware sea muy limitado.
La interfaz de la Xiaomi Mi Band 5 posee desplazamiento en horizontal para lanzar los llamados accesos directos (música, tiempo, notificaciones...); y desplazamiento en vertical para que podamos movernos por todos los valores que es capaz de monitorizar. Realizar un entrenamiento, ver el PAI, comprobar manualmente el ritmo cardíaco, activar los ejercicios de respiración, comprobar el estrés o acceder al registro de salud femenina: basta con deslizar el dedo en vertical por la pantalla para que vayan cargándose los elementos; con una pulsación para entrar en las opciones de cada uno.
Dado que Xiaomi ha incluido una enorme cantidad de funciones en la Mi Band 5, conviene ajustar el número de accesos directos, de ajustes de pantalla y de tipos de entrenamiento a los que estrictamente se utilicen (desde las opciones de Mi Fit). De dejarlos todos activos resulta muy engorroso encontrar uno concreto: hay que realizar una notable cantidad de deslizamientos, tanto en vertical como en horizontal.
Xiaomi Mi Fit, el complemento de la Mi Band 5
La aplicación del teléfono sigue siendo el centro de la experiencia con la Mi Band 5 por más que Xiaomi haya independizado en parte su uso con el último modelo. Mi Fit muestra todas las gráficas de los ejercicios así como sus datos; mientras permite registrar entrenamientos aprovechando el GPS del teléfono y los sensores de la pulsera. Más allá de los registros deportivos y de salud, Mi fit permite configurar la Mi Band 5, establecer objetivos o añadir amigos con los que enfrentarse (y de paso mejorar la forma).
Ya hemos visto la personalización desde la app: elegir una carátula, y enviarla a la Mi Band 5, supone un proceso de pocos segundos. Además, Mi Fit permite configurar todos los accesos directos del dispositivo así como los menús de las funciones que ofrece. Lo mejor es eliminar de la Mi Band 5 todos los ajustes que no se usen: como decíamos antes, encontrar una opción concreta entre los deslizamientos táctiles puede ser un engorro.
Mi Fit permite configurar alarmas, recordatorios, se puede configurar el modo nocturno para que la pantalla no se active mientras se registra el sueño, la app deja elegir qué apps pueden enviar notificaciones a la Mi Band 5, decidir si se envían avisos de llamadas y muchas más opciones.
Más allá de la salud: desde notificaciones a recordatorios
Xiaomi ha mejorado el registro deportivo y ha puesto mayor énfasis en la salud del usuario, ya lo hemos visto, pero eso no significa que se haya dejado de lado la utilidad de la pulsera como una extensión del smartphone. Todo lo contrario: la Mi Band 5 es aún más práctica que su predecesora.
La mayor superficie de pantalla del nuevo modelo facilita la lectura de las notificaciones. Leer los WhatsApp recibidos no es un engorro ya que la pantalla suele dar de sobra para enterarse de las notificaciones entrantes sin encender el teléfono. Sí, sigue sin permitir responder los mensajes, pero tampoco es algo que deba pedírsele a una pulsera de sus características y precio.
Aparte de las notificaciones, la Xiaomi Mi Band 5 permite controlar la reproducción de la música gracias a su acceso directo disponible deslizando la interfaz hacia los lados. Esto es sumamente práctico y funciona muy bien. Lástima que haya que buscar la función porque la pulsera no lo activa automáticamente, es una pequeña pega.
Un último detalle que se agradece es el disparador a distancia de la cámara. La función puede añadirse como acceso directo y debe configurarse desde el apartado 'Laboratorio' de Mi Fit. Una vez configurada, basta abrir la cámara en el teléfono, apuntar y pulsar en la Xiaomi Mi Band 5: foto hecha.
Menor autonomía por más que siga siendo excelente
Xiaomi redujo ligeramente la autonomía con respecto al anterior modelo para así equipar más tecnología en idéntico espacio. Los 125 mAh de los que cuenta la pulsera arrojan una cifra teórica de 20 días, pero resulta muy difícil llegar a ella; al menos si se usa la Mi Band 5 con todas sus funciones activas. Aun así, tiene autonomía más que de sobra para despreocuparse durante bastantes jornadas.
Según nuestras pruebas, el gasto medio de la pulsera se sitúa en torno al 8-10 % diario con consultas esporádicas, brillo al nivel 3, lectura de ritmo cardíaco activado y sin registro de ejercicio más allá del movimiento diario. Siendo más activos, y con más notificaciones y brillo por encima del nivel 4, el consumo puede sobrepasar el 10-12 % de batería diario. Por nuestros cálculos, y siempre con un uso habitual, la batería suele llegar a los 10-12 días de uso básico; con menos de 10 días si se utiliza la Xiaomi Mi Band 5 más activamente, en especial para registrar prácticas deportivas (con o sin móvil conectado).
La carga ha mejorado por el uso del conector, no en tiempo: conectada al puerto USB de un ordenador, la Xiaomi Mi Band 5 se recarga en una dos horas desde que pide conectarla al cargador hasta que llega al 100 %. Con unos 20 minutos de carga bien batería para más de dos días.
Xiaomi Mi Band 5, la opinión de Xataka
Como todas las Mi Band que ha ido poniendo en el mercado, Xiaomi continúa manteniendo una de las mejores relaciones calidad/precio dentro del segmento de las pulseras de actividad. Tiene muchos competidores con un uso parecido por menos dinero: la Xiaomi Mi Band 5 y sus 39,99 euros de precio oficial no son los más baratos de su mercado. Encima, Xiaomi tiene al enemigo en casa: la Xiaomi Mi Band 4, que tampoco se aleja en exceso y puede conseguirse fácilmente por 25 euros o menos.
Nuestra experiencia con la Mi Band 5 ha sido muy positiva. Xiaomi ha mejorado el registro deportivo acercándose en términos de fiabilidad a un smartwatch competente. Y la lectura de ritmo cardíaco, por más que no sea continua más allá de las prácticas deportivas, ha demostrado ser bastante fiable. Lástima que la marca no haya puesto en el mercado español el modelo con NFC: tener los pagos en la muñeca, y con un accesorio tan económico como la Mi Band 5, sería un gran añadido de valor. Veremos si termina llegando.
La batería es más que suficiente para no preocuparse de cargarla durante días, el añadido de PAI incrementa el deseo de moverse, el registro automático de sueño es preciso y suficientemente fiable (incluso la siesta), tener los modelos deportivos más habituales incrementa ese enfoque al deportista amateur y se agradece que Xiaomi haya incorporado extras como el disparo remoto de la cámara o el control del estrés. Estos detalles añaden un notable valor a la Mi Band 5.
El salto con respecto a la Xiaomi Mi Band 4 no es excesivamente grande, eso es verdad, pero sí lo suficiente como para apuntar a este modelo si buscas una nueva pulsera y pretendes llevarla para algo más que las notificaciones y el conteo de pasos. Si no es el caso, o ya utilizas otro accesorio para registrar las rutas, seguramente te compense más la Xiaomi Mi Band 4. Las dos se mantienen en lo mejor de su rango.
Xiaomi Mi Band 5 - Smart Fitness Bracelet Black
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